Actuar como Eva Perón no es fácil. Su imagen genera pasiones escondidas en todos los argentinos. Cada vez que una actriz se puso en su piel las opiniones del público fueron instantáneas. En un siglo XX politizado, Evita es esa figura que, al igual que Juan Domingo Perón, genera polémica.
Perfil.com se comunicó con Esther Goris y Anamá Ferreyra y les preguntó que sintieron al protagonizar el papel de Evita. Sus declaraciones dan cuenta de la importancia que ambas le dieron a esa responsabilidad.
El feliz error. En 1996 la reconocida actriz argentina Esther Goris protagonizó el papel de Evita en Eva Perón. A diferencia de otras obras, la del director Juan Carlos Desanzo se basó principalmente en la vida política de la dirigente. “ Tuvieron el feliz error de elegirme a mí” comentó entre risas Goris, quien solo tuvo un mes de preparación para el debut.
En esos 30 días, “me leí los libros más importantes acerca de ella . Estuve mirando horas y horas para ver como se movía”. Además de los archivos, Esther contactó gente que la había conocido personalmente a Evita, como por ejemplo “la enfermera que la cuidó hasta último momento” .
La actriz reconoció que fue una “gran responsabilidad” hacer ese papel, pero añadió que “me gané la confianza de mucha gente a fuerza de pasión por mi trabajo”.
La Evita brasileña . Anamá Ferreyra encarnó, este año, el mítico personaje en la obra de teatro Femenino, de Cristian Morales. La actriz fue la primera mujer negra en protagonizarla. Con sentido del humor, Ferreyra se preguntó “¿Por qué los personajes tienen que ser de un solo color? ¿qué podrían hacer entonces japoneses o chinos?”.
Anamá se declara fanática de Evita y hasta tiene un cuadro de ella en el living de su casa. Sobre la obra dijo que “me pareció muy contradictorio y para la polémica. Fue una humorada pero con respeto por la figura que es Eva”.
En cuanto a la opinión del público, Ferreira admitió que al principio se sintió “rara” porque creía que la gente criticaría la obra. “Pensaba que la gente diría ´¿Cómo una negra va a hacer de Evita?´”.
Después salió adelante. “Cuando empezaba a cantar la gente se emocionaba. Fue bastante fuerte y hubo una audacia total”. Por último, comentó su “orgullo y amor por una mujer a la que le faltó tiempo. Igualmente hizo mucho en sus 33 años”
(*) Redactor de Perfil.com