Un incendio provocó que la actriz Kate Winslet y sus hijos fueran desalojados de la mansión del multimillonario Richard Branson donde se hospedaban, situada en su isla privada de las Islas Vírgenes, informó hoy la edición digital del diario Los Angeles Times.
El fuego se originó la pasada noche y provocó el desalojo de unas 20 personas, entre las que también se encontraban la madre de Branson, Eve, y su hija, Holly. La vivienda, conocida como "The Great House", quedó completamente destruida.
Se trata de una mansión de ocho habitaciones ubicada en la isla Necker, en el Caribe, propiedad privada del fundador del grupo Virgin.
Branson se encontraba en un lugar cercano junto a su esposa y su hijo de 25 años, Sam. Ninguno de los huéspedes de la mansión sufrió daños.
"Sufrimos una tormenta tropical realmente mala, con vientos de hasta 144 kilómetros por hora. Un enorme rayo cayó sobre la vivienda en torno a las 4 de la mañana", explicó el empresario en un comunicado.
"Mi hijo Sam llegó aprisa a la casa y ayudó a todos a salir de allí", añadió.
Winslet se encontraba de vacaciones con su hija de 10 años, Mia; su hijo de 7 años, Joe, y su pareja actual, el modelo británico Louis Dowler. La intérprete británica y el director Sam Mendes se separaron el año pasado.
"Queremos reconstruir la casa tan pronto como sea posible", explicó Branson, quien comentó que su oficina principal se encontraba en esa propiedad y que ha perdido centenares de fotografías que guardaba allí. El millonario agradeció a Winslet por ayudar a su madre de 90 años a salir del lugar.
Fuente: EFE