El actor estadounidense David Carradine, muerto en circunstancias todavía no esclarecidas en Bangkok, Tailandia, tenía predilección por prácticas sexuales "anormales", según afirmaciones de su ex mujer, la actriz Marina Anderson.
Así consta en los documentos de divorcio del matrimonio, donde Anderson, de 56 años, declara que su ex marido tenía un “repugnante y anormal comportamiento sexual”, al tiempo que lo acusa de haber mantenido una relación incestuosa con un “miembro muy próximo de la familia”.
La actriz estadounidense-canadiense estuvo casada con Carradine entre 1998 y 2001, año en que decidió divorciarse del actor de Kung Fu por “dificultades” en sus relaciones, producto de sus prácticas “anormales”. “El seguimiento de su repugnante y anormal comportamiento sexual, que era potencialmente letal, también condujo a dificultades en nuestras relaciones", declaró la mujer ante el tribunal durante su divorcio, según a los documentos a los que tuvo acceso la página de internet The Smoking Gun, un portal especializado en casos judiciales.
Anderson, además, acusó a su ex marido ante los tribunales de haber tenido una relación incestuosa con "un miembro muy próximo de la familia", que también se mantuvo durante el matrimonio. Carradine, según los documentos, no siguió los consejos de su entonces esposa de buscar ayuda profesional.
El actor, de 72 años, fue hallado el martes muerto en un hotel de lujo de Bangkok, ahorcado con el cordón de una cortina dentro de un armario, con las manos atadas y su cuello amarrado al pene. Carradine se encontraba en filmando una película en esa ciudad tailandesa.
Fuente: DPA