La noche de oro del cine y la televisión

Comienza la temporada de premios. Pero nada es igual. No después de 2017. La entrega número 75 de los Golden Globe es el primer evento de la temporada de alfombras rojas y discursos, además de Prodes entre amigos y momentos para cultivar memes. El evento que se verá aquí desde las 21 por TNT y tendrá lugar en Los Angeles, en el Beverly Hilton, será la primera gran entrega de premios después del año donde los escándalos por denuncias de abuso sexual destruyeron una inocencia que, como se descubrió a partir de la publicación de un artículo detallando abusos de Harvey Weinstein, empresario y productor alguna vez gigante e imposible de esquivar del cine independiente, no era tal. Y los Golden Globe, el premio que da la Asociación de Prensa de Hollywood (que reúne a más de noventa periodistas internacionales que trabajan para 55 países), lo saben. Por eso, en sus piezas, ya sea gráficas o de video, la frase que busca funcionar como leyenda, dicha por el conductor Seth Meyer (que reemplaza a Jimmy Fallon) es: “Tenemos mucho de que hablar” (con enfasís en el “mucho”).

Por lo pronto, y parece que será tendencia en todas las ceremonias, las mujeres que asistan al evento han confirmado que vestirán de negro como forma de protesta contra la desigualdad y la violencia de género en la industria. Entre los nombres que ya confirmaron esa forma de vestir, se encuentran las nominadas como Emma Stone, Meryl Streep y Jessica Chastain. A pesar de las protestas de la actriz Rose McGowan, que devino punta de lanza de las denuncias y que definió como “hipocresía” la actitud de usar el negro, varios hombres han decidido plegarse: Dwayne Johnson, Chris Hemsworth, Liev Schreiber, Nikolaj Coster Waldau y Arnie Hammer. Además de la protesta, el clásico premio Cecil B. De Mille será otorgado a quizás el nombre más gigante en la industria del entretenimiento norteamericana, Oprah Winfrey, quien seguro y fiel a su estilo y su trabajo hable sin pelos en la lengua. Por lo pronto, Hollywood no tendrá tiempo de abofetear verbalmente a Donald Trump, tal como sucedió recientemente. Ahora le toca mirarse, aunque esté vestido de negro, el ombligo.

En lo que respecta a las nominaciones, esta edición de los Golden Globe, que siempre sirve como faro (o excepción) a lo que la Academia lleva a cabo en los Oscar, posee por el lado del cine como película con más nominaciones, siete exactamente, a La forma del agua, la película de Guillermo del Toro que se estrena el 22 de febrero en nuestro país, y por el lado de la TV, la mayor cantidad de nominaciones se las llevó Big Little Lies, la miniserie de HBO (ahora devenida serie), con seis. Del lado del cine siguen a Del Toro: The Post, la supuesta nueva maravilla de Steven Spielberg, y 3 anuncios por un crimen, de Martin McDonagh, además de Lady Bird, con fecha de estreno en Argentina en mayo y con cuatro nominaciones. Detrás de Big Little Lies está Feud. Bette & Joan con cuatro nominaciones y The Handmaid’s Tale, This is Us y Fargo con tres. La cadena más nominada es HBO, con 12 nominaciones, Netflix sigue con nueve, FX con ocho, NBC y Showtime con cinco.

A Seth Meyers en la conducción se suman ex conductores como Tina Fey, Amy Poehler y Ricky Gervais, quien se cree puede dar la nota con su humor incisivo y descarado. Se suman presentadores como Penélope Cruz, Seth Rogen, Gal Gadot, Kerry Washington, Kelly Clarkson, Chris Hemsworth, Ricky Martin, Sharon Stone y Alicia Vikander, entre otros. Como contracara a cierta crítica del estado actual de Hollywood, no hay este año nominaciones para mujeres en la categoría Mejor Director (y eso que había tres posibles candidatas). Solo hay cinco nominaciones a actores de color, entre treinta nominaciones posibles. Entre los grandes ignorados se cuentan David Lynch y su tercera temporada de Twin Peaks, la serie Mindhunter, la gran ganadora de los Emmy, Veep, y la comedia The Good Place. Incluso la serie de moda de 2017, 13 Reasons Why, solo consiguió una nominación. Solo resta ver cuánto influye en los Oscar esta entrega, pero principalmente cuánto marca el nuevo formato de premiación: uno donde ya no se puede ignorar lo sucedido.