Un simple llamado con el único propósito de saludarla y preguntarle sobre sus proyectos derivó en una confesión inesperada. "Por suerte, en lo profesional me está yendo bastante bien. Me llamaron para participar en Mitos (miércoles 22.15 por América) y con la guardería y venta de perros de raza tengo muchísimo trabajo. Pero, me pasó algo que no puedo dejar de contarles a ustedes que siempre están a mi lado: Tengo gripe A. Sí, me agarré la porcina nomás...", nos sorprende nuestra querida amiga y gran actriz la "Tana" Noemí Alan.
Esa vedette dueña de un lomazo y unas lolas bien pulposas -y naturales- que surgió a la fama a fines de los '70 cuando Juan Carlos Calabró la convocó para participar de su exitoso ciclo humorístico Calabromas. A partir de allí, la ex bomba sexy que también brilló en Hiperhumor, donde se sacaba una prenda hasta quedar en tanguita para dejar a todos los hombres con la boca abierta con su inolvidable frase "para sacarme la tanquita, van a tener que esperar hasta la otra semanita", construyó una carrera que le deparó mucho trabajo y sacrificio y que, para su fortuna, aún hoy la tiene en escena con La tana Alan como en casa y a corazón abierto, una obra dirigida, producida y actuada sólo por ella.
"En realidad, Lara (19 años) y Jano (14), (sus dos hijos) me dan una gran mano tanto en la producción como arriba del escenario, ya que Jano está dando sus primeros pasos sobre las tablas contando chistes", agrega antes de retomar el hilo sobre la confesión de su enfermedad. " No me salvo de ninguna, viejo. ¡Qué barbaridad, me las pesco a todas...!", expresa, en medio de una de sus habituales explosivas sonrisas.
Más que un simple resfrío. Aún en pleno tratamiento contra la gripe A, la Tana Alan sigue sin saber cómo fue que se contrajo esta enfermedad que, lamentablemente, en la Argentina ya se lleva cobradas más de 160 víctimas fatales (al menos, según cifras oficiales del Ministerio de Salud de la Nación). "Como suele pasar cada vez que me enfermo, todo me pasa sin saber por qué. Pero me pasa...", comienza con su relato sobre el origen de su enfermedad.
"Hace un par de semanas me empecé a sentir un poco mal. Tenía todos los síntomas de que me estaba por engripar y como yo no tengo a nadie que me mantenga y soy muy fuerte no le di mucha importancia. Pensé que se trataba de un simple resfrío y nada más que eso", dice, refugiada en su casa junto a sus hijos y perros de raza. Aunque, barbijo de por medio, nos confiesa que, al menos, tiene un par de sospechas acerca de cómo se contagió la gripe A.
"Como vivo en Hudson, partido de Berazategui, soy de ir muy poco a Capital y mucho menos aún de viajar en subte. Pero hace un par de semanas, cuando estábamos en pleno boom de la fiebre de la gripe A, se me ocurrió viajar en subte y una señora que viajaba a mi lado se la pasaba dele toser y toser. Como tenía barbijo puesto realmente no le di mucha importancia. Un par de días después, Mirtha Legrand me invitó para su programa y estuve sentada muy cerca de Horacio Rodríguez Larreta, el jefe de Gabinete porteño que fue invitado precisamente para contar su experiencia por haber contraído la gripe A. Cuando nos saludó en los pasillos antes del programa, él nos dijo a todos que nos quedáramos tranquilos porque ya estaba totalmente repuesto. Yo le creí, pero...", relata con una sonrisa picaresca.
La nota completa, en la edición de la Revista Semanario que sale mañana.