En 2005, cuando decidió abrir su productora Rosstoc, Gastón Pauls nunca imaginó que terminaría
hoy con más de
4.000.000 de pesos en deudas
y
despidiendo a varios empleados
. Con mucha esperanza, decía, quería que su empresa fuera "seria y justa".
En una entrevista
con el suplemento Espectáculos del diario
Perfil del 9 de agosto de 2008, ante la pregunta "¿Sos justo a la hora de negociar
contratos?", Pauls respondió: "Yo tengo un socio, mi contrato como actor lo negocia él.
Siento que tenemos ganas de generar, como productora nueva, un espacio de laburo con
condiciones justas y serias. Ahí es donde uno marca la diferencia".
"Lo que más me preocupa a mí es la mayor honestidad posible conmigo mismo",
afirmío el actor, y agregó: "después, si eso me diferencia de algunos otros a los que no me quiero
parecer en nada. Y me emparenta con quienes tengo respeto".
Sobre la experiencia como productor Pauls contó que en la televisión actual "hay muchos
espacios y muchos caminos para decir lo que uno cree, piensa y siente". Y añadió: "La televisión
está llena de
productores que roban proyectos, llena de productores que pagan dos mangos en vez
de pagar un poco más. Por otro lado, también esconde muy pequeños huecos donde uno puede empezar a
encontrar otros caminos. Espacios donde uno puede bajarse los pantalones hasta donde quiera".