Es cierto. En Argentina el promedio de edad de las grandes vedettes supera los cincuenta años. Moria Casán, Carmen Barbieri, Adriana Aguirre o Graciela Alfano desplegaron estos últimos años en Showmatch la misma sensualidad que las chicas de veinte y mostraron, también, el mismo centimetraje de carne. Pero hay alguien que sin dudas las supera en ambas cosas: la desnudista estadounidense Tempest Storm, de 80 años.
Con su frondosa melena anaranjada, varias capas de maquillaje y trajes diseñados para la ocasión, Storm desafía el paso del tiempo sobre la tarima de un club de desnudistas.
Pero este no es el caso de una jubilada desesperada ni de una ama de casa que descubrió su vocación en forma tardía. Desde la década del 50 se dedica al espectáculo y no sólo fue una de las más aplaudidas stripper de la época sino que filmó además películas y actuó en teatros.
Hasta 1997 dedicaba cada una de sus noches a quitarse la ropa. Ahora lo hace eventualmente, pero está lejos de pensar en retirarse, a pesar de que la aquejan fuertes dolores debido a una avanzada artritis. " No estoy preparada para dejar mi espectáculo. Tengo muchos fans que no me lo perdonarían", le dijo al canal de noticias CNN.
Entre esos fanáticos hubo uno que ocupó, además, un lugar privilegiado en su vida. Y no era un hombre cualquiera. Según ella cuenta, una noche Elvis Presley fua a verla a un club de Las Vegas y quedó totalmente obsesionado. Vivieron un largo romance que terminó por recomendación del manager del cantante.
Pero ese no fue el único famosos con el que tuvo relación. También fue amiga de Frank Sinatra, Mickey Rooney, Dean Martín y Nat King Cole.