La reina Isabel II de Gran Bretaña anunció que no pronunciará este año el tradicional discurso para inaugurar la nueva sesión del Parlamento mientras su país se prepara para cuatro días de grandes celebraciones por su "Jubileo de Platino", es decir, sus 70 años de reinado.
A sus 96 años, la monarca sostiene su promesa de reinar hasta el día de su muerte, pero sus crecientes problemas de salud le dificultan el trabajo. Por esto, será sustituida por su hijo mayor y heredero, el príncipe Carlos, en una pomposa ceremonia que se desarrollará este 10 de mayo en el Palacio de Westminster.
La reina, que de esta forma no saldrá del Castillo de Windsor, "sigue teniendo problemas episódicos de movilidad y, tras consultar con sus médicos, ha decidido a regañadientes no asistir al discurso del trono", explicó el Palacio de Buckingham en un comunicado.
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La ceremonia que se desarrollará el martes a la mañana, que reúne a Comunes y Lores ante el trono de la reina, suele transcurrir con gran pompa, aunque por la avanzada edad de la reina se fueron abandonando algunas de sus tradiciones, como el uso de un carruaje de caballos, la corona y la túnica reales.
Durante sus 70 años de reinado, la reina Isabel II solo faltó a esta cita casi anual en dos ocasiones: en 1959 y 1963 cuando estaba embarazada de los príncipes Andrés y Eduardo respectivamente, y el discurso del trono fue leído por el vizconde Kilmuir, Lord Canciller.
Isabel II tenía 25 años cuando se convirtió en reina al morir su padre, el rey Jorge VI, en febrero de 1952. En 2012, la monarca celebró sus 60 años de reinado (Jubileo de Oro) y en 2015 se convirtió en la monarca inglesa con más años de permanencia en el trono, superando los 64 años que reinó su tarabuela, la reina Isabel II.
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En febrero de 2002, Isabel II alcanzó el hito de los 70 años de reinado -que serán celebrados en junio- y este 9 de mayo, con 70 años y 91 días de reinado, superó al príncipe Juan II de Liechtenstein (1840-1929) y se colocó en el puesto 3 del ranking de monarcas con los reinados más extensos de la historia.
Pero la "reina de hierro" ya no es tan joven y su salud es motivo de preocupación desde que, en octubre de 2021, los médicos le ordenaron guardar reposo y estuvo una noche hospitalizada para someterse a unas "pruebas" cuya naturaleza nunca se especificó.
Desde entonces la reina canceló su participación en eventos destacados y se la vio con bastón y dificultades para desplazarse en sus escasas apariciones públicas. Además, contrajo Covid-19 en febrero, lo que en sus propias palabras la dejó "muy cansada y agotada".
Unos meses atrás, declinó recibir el premio al "Anciano del Año" diciendo que uno es "tan joven como se siente".
ds
