Al menos 33 personas murieron y 13 permanecen desaparecidas luego de que se incendiara una mina en Kazajistán, de acuerdo a lo que informó este sábado 28 de octubre el Ministerio de Situaciones de Emergencia.
El operador ArcelorMittal Temirtau, es la unidad local del fabricante de acero con sede en Luxemburgo y declaró que 206 de las 252 personas de la mina de Kostenko habían sido evacuadas luego de lo que parecía ser una explosión de metano.
El presidente kazajo, Kassym-Jomart Tokayev, expresó sus condolencias a las familias de las víctimas del accidente y declaró un día de luto nacional el 29 de octubre. Además, ordenó a su gabinete que suspendiera la cooperación en materia de inversiones con la fábrica de acero.
Al mismo tiempo, el gobierno y la empresa aseguraron que estaban avanzando en la nacionalización de la fábrica que explota la mayor siderúrgica del país.
"ArcelorMittal también puede confirmar, tal y como ha comunicado hoy el Gobierno de Kazajistán, que ambas partes han mantenido conversaciones sobre el futuro de ArcelorMittal Temirtau y que recientemente han firmado un acuerdo preliminar para una transacción que transferirá la propiedad a la República de Kazajistán", informó la minera.
"ArcelorMittal se ha comprometido a completar esta transacción lo antes posible con el fin de minimizar las perturbaciones en la mayor medida posible", agregaron.
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El viceprimer ministro Roman Sklyar había anticipado el mes pasado que Kazajistán estaba en conversaciones con posibles inversores que podrían hacerse cargo de la planta, ya que había un descontento con ArcelorMittal por el incumplimiento de sus obligaciones de inversión, mejora de equipos y por no garantizar la seguridad de los trabajadores tras una serie de accidentes mortales.
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