América Latina contendrá el aliento el próximo 3 de noviembre, cuando Donald Trump y Joe Biden se enfrenten en las elecciones presidenciales en Estados Unidos. Si bien la región no es prioridad para Washington, que se enfocará en la recuperación económica y en la gestión de la pandemia, y la agenda de su política exterior no se modificará sustancialmente, habrá cambios en las formas, en los énfasis y en los medios de la diplomacia estadounidense dependiendo quién ocupe el Salón Oval a partir de enero de 2021.
En un dossier publicado esta semana por la Red Argentina de Profesionales para la Política Exterior (Redappe) al que tuvo acceso PERFIL, especialistas en Relaciones Internacionales de Argentina, México y Brasil estimaron cómo será el vínculo interamericano en momentos en que el ascenso de China preocupa a Washington. Los analistas difieren sobre cómo será el segundo mandato de Trump: algunos consideran que habrá continuidades, mientras que otros piensan que, sin necesidad de ir por un nuevo mandato, habrá cambios. En tanto, coinciden en que el republicano apostará por el unilateralismo y el bilateralismo en sus políticas comerciales, migratorias, y de seguridad, mientras que su rival demócrata revivirá un enfoque multilateralista en el Hemisferio Occidental.
“La intuición nos dice que un segundo mandato de Trump podría ser similar al primero. Es probable que haya continuidad, pero razono también que podría haber cambios”, asegura Federico Merke, director de la Maestría en Economía y Política Internacionales de la Universidad de San Andrés. “Ya libre de las presiones domésticas por la reelección, Trump podría buscar un acercamiento más personal con Nicolás Maduro o Miguel Díaz-Canel para mostrar sus supuestas habilidades en el arte de la negociación”, estimó.
En el documento, titulado “Trump o Biden: Las elecciones en Estados Unidos y su impacto en América Latina”, también brindó su diagnóstico Anabella Busso, profesora de la Universidad Nacional de Rosario e investigadora del Conicet. “En caso que Donald Trump sea reelecto habrá continuidad aunque algunas tendencias se acentuarán. Migraciones; narcotráfico y crimen transnacionalizado; comercio y los casos de Venezuela y Cuba seguirán ocupando el centro de la escena”.
Ese énfasis en lograr un cambio de régimen en Caracas fue explicitado por el secretario de Estado, Mike Pompeo en una gira por Brasil, Guyana, Surinam y Colombia, en la que abogó por la salida de Maduro del poder. “Sabemos que el régimen de Maduro ha diezmado al pueblo de Venezuela y que el propio Maduro es un narcotraficante acusado. Eso significa que tiene que irse”, dijo en Georgetown, la capital de Guyana.
“Tanto las cuestiones involucradas en la disputa geopolítica con China por el predominio sobre Latinoamérica como aquellas ligadas al escenario pospandemia se jerarquizarán”, agregó Busso.
Alternativa demócrata. “Biden desea restituir el papel de los Estados Unidos como líder político y moral en el mundo, como país articulador de respuestas colectivas a problemas comunes –sostuvo Natalia Saltalamacchia, profesora del Instituto Tecnológico Autónomo de México-. En la región estará inclinado a recurrir no sólo a la vía unilateral o bilateral como Trump, sino a trabajar mediante iniciativas plurilaterales y organismos multilaterales”.
Según Augusto Dall’Agnol, vicepresidente del Instituto Sul-Americano de Política y Estrategia de Brasil, “en caso de una victoria de Biden seguramente los países latinoamericanos que están umbilicalmente asociados a Trump serán vistos internacionalmente como Estados parias”. “Biden quizás ofrece un escenario más conocido a los países de la región”, afirma.
Según los promedios de encuestas elaborados por Real Clear Politics, Biden encabeza la intención de voto a nivel nacional por seis puntos, mientras que en los Estados claves su ventaja se reduce a 3,9%. Esa brecha es aún menor en Florida, Carolina del Norte y Ohio, que serán decisivos en el Colegio Electoral, donde los sondeos están dentro del margen de error. La carrera está más abierta que nunca.
Pompeo disparó contra Maduro junto a Duque
Agencias
El presidente de Colombia, Iván Duque, llamó ayer a la comunidad internacional a actuar contra Nicolás Maduro por crímenes de “lesa humanidad”, en una conferencia de prensa conjunta con el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Mike Pompeo. Duque habló al término de una gira de tres días de Pompeo por países vecinos de Venezuela con el objetivo de incrementar la presión para que el líder chavista abandone el poder.
El mandatario colombiano, aliado clave de Estados Unidos en la región, alegó que un informe publicado esta semana por la ONU confirma que “hay violaciones a los derechos humanos de manera sistemática” y que “la cabeza de la dictadura es en sí mismo un criminal de lesa humanidad y la comunidad internacional tiene que actuar para que esta situación termine”.
El informe de 411 páginas de la ONU denunció “motivos razonables” para creer que autoridades y fuerzas de seguridad de la otrora potencia petrolera planificaron y ejecutaron “crímenes de lesa humanidad”.
Pompeo describió a Duque como “un verdadero líder para la región” y dijo que el apoyo de Duque “al presidente interino de Venezuela Juan Guaidó” es “increíblemente valiosa”.