INTERNACIONAL
Abdelbaki es Satty

Apuntan a un imán musulmán como el cerebro del atentado en Barcelona

Dirigía las oraciones en la mezquita del pueblo donde vivían los terroristas. Desapareció cuando el grupo empezó a planificar el ataque. Investigan si murió antes de la masacre.

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Homenajes y alerta. Los ciudadanos de Barcelona continuaron ayer con el tributo a las víctimas. Un fuerte operativo policial se desplegó fuera de la basílica de la Sagrada Familia, que habría sido el blanco original de los planes de la banda terrorista. | AP y AFP
Barcelona
Un imán de la localidad catalana de Ripoll, donde vivían todos los miembros de la banda terrorista que atentó el pasado jueves en Barcelona, se convirtió ayer en el eje de la investigación policial sobre el ataque. Los servicios antiterroristas de los Mossos d’Esquadra trabajan con la hipótesis de que Abdelbaki Es Satty, un marroquí de unos 45 años que oficiaba como predicador del credo musulmán en Ripoll, sería quien radicalizó a los jóvenes atacantes e ideó el atentado con explosivos que los yihadistas iban a cometer antes de que un estallido accidental frustrara su plan.

Los investigadores pudieron determinar que la intención original del grupo era llevar a cabo un ataque de proporciones mayores, para lo que habían ocupado una casa en el municipio de Alcanar donde almacenaban decenas de garrafas de gas butano y una considerable cantidad de triperóxido de triacetona, un compuesto conocido como “la madre de Satán” y de mención frecuente en foros yihadistas. De acuerdo con algunas versiones, la idea era atacar la emblemática basílica de la Sagrada Familia. En la madrugada del jueves, sin embargo, una explosión imprevista los obligó a cambiar de planes e improvisar los atentados con camionetas en Las Ramblas de Barcelona y en Cambrils. Entre los escombros de la casa de Alcanar fueron hallados los restos de dos personas aún no identificadas. La policía cree que uno de los muertos por la explosión sería Abdelbaki.

El imán de Ripoll desapareció repentinamente de esa pequeña localidad rural de diez mil habitantes a principios de junio, justo cuando los integrantes de la banda terrorista ocuparon la casa donde se planificó el ataque. Vecinos consultados por la prensa española describieron a Abdelbaki como un hombre muy reservado que enseñaba árabe a los niños del pueblo. En sus oraciones religiosas nunca había dejado entrever una visión radical del islam. Había salido de la cárcel en 2012, luego de problemas con la ley por irregularidades en su status migratorio.

Orador. Abdelbaki ejercía como imán en Ripoll desde 2015. Su función consistía en guiar las oraciones de los fieles reunidos en la mezquita. Según el relato de los vecinos, cuando abandonó el pueblo les dijo a algunos conocidos que quería mudarse a Bélgica, adonde habría viajado con frecuencia. Bélgica es uno de los mayores centros de reclutamiento yihadista en Europa y ha sido blanco del terrorismo en los últimos años.

En busca de pruebas y muestras de ADN, los Mossos registraron ayer la casa del imán: un modesto departamento en el que le subalquilaba una habitación a otro ciudadano marroquí. Este les dijo a los policías que había hablado por última vez con Abdelbaki el martes, y que él le había dicho que pensaba regresar a Marruecos para reunirse con sus hijos. Su compañero de piso describió a Abdelbaki como una persona “muy normal”, aunque “un poco tímido y cerrado”.

A última hora de ayer, el diario español El País publicó, basado en fuentes policiales, que el imán habría sido “amigo o conocido” de algunos de los terroristas detenidos por los mortíferos atentados en la estación de trenes española de Atocha en 2004.

Buscan al presunto conductor
La policía seguía ayer a la caza del presunto conductor de la camioneta que atropelló y mató a 13 personas en Las Ramblas de Barcelona: Younes Abouyaaqoub, un joven marroquí de 22 años que, hasta el jueves, llevaba una vida aparentemente normal en la localidad catalana de Ripoll, en la provincia de Girona. Allí estudió educación secundaria y, de acuerdo con el relato de vecinos que lo conocían, se relacionaba sobre todo con jóvenes también de origen marroquí. Según fuentes policiales, la documentación de Abouyaaqoub se encontró dentro de una segunda furgoneta interceptada por la policía tras el ataque en Las Ramblas.
La principal hipótesis de los investigadores es que tras una explosión accidental en una casa del municipio de Alcanar, que frustró los planes originales de la banda de atentar con explosivos, Abouyaaqoub se separó del resto de la célula yihadista y emprendió el derrotero fatal en el centro de Barcelona. Aún se indaga cómo logró huir solo y a pie.