Miles de pasajeros y tripulantes se ven obligados a permanecer bloqueados a bordo de dos cruceros en Asia, tras detectarse casos del coronavirus que provocó centenares de muertes en China y preocupación en el mundo. Más precisamente en el "Diamond Princess", que se mantiene en cuarentena frente a Yokohama, cerca de Tokio, hay 61 casos declarados a bordo, entre ellos uno de los 8 turistas argentinos, cuyo diagnóstico fue confirmado este viernes.
Para miles de pasajeros, el viaje en el crucero de lujo se transformó en un hastío al quedar confinados por un periodo que podría alcanzar 14 días.
En los últimos días, médicos realizaron 273 pruebas sobre las más de 3.700 personas (de 56 nacionalidades) que están a bordo del Diamond Princess después de que fuera detectada la enfermedad en un hombre que había descendido del buque en Hong Kong en enero. Los 61 infectados fueron evacuados y trasladados a hospitales, pero el resto de los pasajeros se ven obligados a permanecer encerrados en sus camarotes día y noche.
Al crucero, que ancló frente a las costas de Yokohama el lunes de noche, se le permitió este jueves atracar en muelle para aprovisionarse y desembarcar a los pasajeros enfermos, en una megaoperación que se realizó en medio de fuertes medidas sanitarias: el personal utilizó trajes de protección, mascarillas y cascos. Los pasajeros que desembarcaron lo hicieron por una pasarela cubierta con una lona blanca y a los que quedaron a bordo se les impidió bajar.
Interrogados por medios de comunicación, varios pasajeros mencionaron que hay cierta confusión a bordo y un gran aburrimiento, puesto que están obligados a permanecer en sus camarotes para evitar eventuales contactos con personas enfermas. "Estamos confinados aquí a tiempo completo", dijo el británico David Abel en un que publicó en Facebook. "La comida cambió por completo. ¡Ya no estamos en un crucero de lujo! (...) Comienza a parecer una prisión flotante", agregó.
Encerrados en sus habitaciones más de 24 hs.
Kent Frasure, de 42 años, y su esposa de 35 años, Rebecca, viajaron desde EEUU para abordar el Diamond Princess , que salió de Yokohama para un crucero de 16 días e hizo paradas en otras partes de Japón, Hong Kong, Vietnam y Taiwán.
Relataron que habían planeado viajar por diversas ciudades de Japón, pero cuando el barco llegó a Yokohama el martes, la tripulación anunció a través de los altavoces que los pasajeros deberían permanecer en sus habitaciones y que estaba en vigor una cuarentena de dos semanas. “Es difícil saber qué va a pasar en los próximos días”, dijo Kent Frasure. “Nos mantienen en la oscuridad”
El destino del barco, y sus pasajeros y miembros de la tripulación, es ampliamente comentado en los medios japoneses. Muchos pasajeros expresaron sus temores y preocupaciones en las redes sociales, y algunos rogaron que se les entreguen medicamentos recetados y otros suministros. Otros simplemente quieren saber qué está pasando. Ante esto, un alto miembro del gobierno nipón dijo el jueves que las necesidades como remedios se entregarían esa noche y los artículos solicitados a partir de entonces se entregarían a los pasajeros “lo antes posible” a partir del viernes.
Según contaron Kent y Rebecca al Japan Times, debieron tomarse la temperatura y someterse a exámenes adicionales, incluidos hisopos de garganta, después de que el hombre respondiera en un cuestionario que estaba tomando ibuprofeno, un analgésico común, por una lesión reciente en la rodilla.
La última vez que se contactaron, relaton que no habían salido de su habitación en más de 24 horas y que los miembros de la tripulación llevaban comidas hasta su puerta con máscaras y guantes. Los alrededor de 3.700 pasajeros del crucero no pueden interactuar entre ellos, excepto inclinándose sobre sus balcones para hablar con personas en habitaciones adyacentes.
Otro crucero en cuarentena en Hong Kong
Mientras tanto, en Hong Kong, otros turistas y tripulación corrieron suerte similar: unas 3.600 personas pasaron la noche bloqueadas a bordo del crucero "World Dream", que regresaba a la ciudad después de que Taiwán le negó el permiso para atracar en su puerto. En éste, tres pasajeros desembarcados dieron positivo por coronavirus y posteriormente fueron evacuados, pero los funcionarios sanitarios de la ciudad advirtieron que los pasajeros no podrán abandonar el barco hasta que se hayan completado las pruebas.
DS
