LOS ANGELES.- Un padre de familia que había sido despedido de su trabajo recientemente disparó el martes contra su esposa y sus cinco hijos antes de suicidarse. La familia, de origen africano, estaba compuesta por Ervin Antonio Lupoe, su esposa Ana, mellizos de 2 y 5 años y una nena de 8 años. Según se indicó, desde la casa habían enviado un fax a una estación de televisión y hasta se habrían contactado con la policía, pero finalmente todo terminó en una tragedia.
La pareja fue despedida de un trabajo en un Hospital, y habrían decidido cometer esta barbarie como una forma de lograr un “escape final”. El hecho ocurrió en Long Beach, un condado cerca de Los Angeles. La policía acudió al lugar casi instantáneamente y encontró los siete cadáveres.
Allí había unas cartas donde se comprobó que la firma Kaiser Permanente, un grupo hospitalario, había despedido a la pareja hace una semana.
El alcalde de Los Angeles, Antonio Villaraigosa comentó que “lamentablemente, esto es una historia común estos días”. El funcionario, de origen latino, le pidió a la comunidad y especialmente a aquellos que pierden sus trabajos que busquen asistencia en las agencias sociales, incluido aquellas los pueden ayudar con desórdenes psiquiátricos. “Hay centros de trabajo, centros de ayuda para los que pierden sus casas y están en juicio, hay médicos, que pueden proveer ayuda para sacarlos a flote” dijo. Esto es una reacción más a la severa crisis que están viviendo los norteamericanos precisó a la prensa local.
"Ahora estamos investigando el caso, pero todo indica que el padre de familia mató a su esposa y a sus cinco hijos y luego con el mismo revolver se suicidó", dijo Ken Garner, portavoz del LAPD. Garner dijo que recibieron el alerta de una cadena de televisión local que aparentemente había recibido una llamada telefónica y un fax en el que Lupoe decía que iba a matar a su familia y luego se suicidaría.
El portavoz de la policía confirmó que el fax decía que Lupoe había perdido hacía poco tiempo su trabajo. "Estaba abatido por su situación laboral. Estaba atravesando una situación crítica en su trabajo y eso lo llevó a quitarse su vida y la de su familia, era lo que decía en el fax", explicó Garner.
"Era una escena espeluznante", dijo el policía al describir la casa donde hallaron los cuerpos de esta familia de siete miembros. "Llevo 32 años en el Departamento de Policía y nunca había visto algo así... es espantoso. Es una tragedia", agregó el oficial.
Un comunicado de Kaiser Permanente confirmó que el hombre muerto y su esposa habían sido empleados del hospital. La región de Los Angeles ha sido escenario en los últimos meses de tiroteos masivos, sobre todo entre familias.
En diciembre un hombre disfrazado de Papa Noel ingresó la noche de Navidad a la casa de su ex esposa de origen mexicano, donde se celebraba una fiesta de más de 25 personas, y abrió fuego apenas le abrieron la puerta.
El hombre dejó en total nueve muertos y luego se suicidó. En octubre pasado, un hombre de 45 años mató a su esposa, tres hijos y su suegra antes de suicidarse en un ataque de desesperación por el caos financiero de esos días, que afectaron los ahorros de este padre de familia desempleado después de meses y que según los reportes posteriores estaba perdiendo todo en la bolsa.
Los tres suburbios donde han tenido lugar estos crímenes son barrios residenciales de clase media emergente.
Fuente: AFP