La sesión especial del Comité de Relaciones del Senado norteamericano protagonizó hoy una tremenda discusión política en torno a la relación bilateral con Argentina, ante la nominación de Noah Mamet como futuro embajador.
El encuentro fue realizado a instancias de la nominación de Mamet como el candidato propuesto por el presidente Barack Obama para ocupar la sede diplomática en Buenos Aires. Mamet es un demócrata de California que jamás pisó Argentina, pero se ha destacado como un joven empresario que logró juntar fondos para las campañas del presidente Obama en la Costa Oeste.
El posible embajador fue zarandeado por dos altísimos miembros del Capitolio, el senador demócrata Bob Menéndez y el republicano Marco Rubio, ambos integrantes de la Comisión que debe aprobar embajadores. Ambos dirigentes son reconocidos en Washington como las voces la política exterior norteamericana en la Cámara.
“Digame, embajador, qué vamos a hacer con Argentina. ¿Ha leído usted los artículos que salen en los diarios sobre Argentina?”, disparó Menéndez. “¿Usted sabe lo que está pasando en Argentina en temas institucionales? ¿Sabe de los ataques a la prensa?”, interrogó. “Ese país está violando una relación de aliado que hemos tenido durante décadas. No se portan como un país democrático. Han atacado e interferido en el Poder Judicial, han comprometido la libertad y aterrorizado a sus ciudadanos, han hecho acuerdos con Irán y está siguiendo la línea de cambiar la Constitución como ha ocurrido en otros países de la región sur, con el solo objetivo de quedarse en el poder”, prosiguió el demócrata.
Estas afirmaciones y otras preguntas, fueron algunos de los comentarios de altísimo tono que hacían los senadores en una tensa sesión frente a un novato candidato, lo que se puede interpretar como un tiro por elevación directo a Buenos Aires.
“No conozco un caso como Argentina que se ría así de nuestras Cortes, que no quiera pagar sus deudas, que hasta inclusive haya tomado un avión militar norteamericano de rehén”, le espetaba en la cara el republicano Marco Rubio.
El propuesto embajador sólo atinaba a murmurar alguna salida diplomática y dejar en claro sus ansias de avanzar sobre “los temas irritantes”, aunque reconocía que Argentina también coopera con Estados Unidos en la lucha contra el terrorismo o el desarme nuclear.
“Argentina no es fácil. Está pasando por una inflación tremenda. Los diarios dicen que puede ir a un default de nuevo, que podría colapsar. Eso sería su destino y es un país clave regional. ¿Ha estado usted en Argentina alguna vez? ¿Sabe del problema que existe con el narcotráfico y las drogas, y la ineficiencia del gobierno para armar un programa clave sobre esto?”, seguían los legisladores..
Hacia el final, el martillo del Presidente de la Comisión (Menéndez) golpeó duro en su atril. “Seguiremos evaluando y confirmaremos nuestra posición a tomar con Argentina y su futura nominación”, espetó.
Caída la tarde en Washington, terminaba hoy una sesión cuya tensión hacía tiempo no se veía, llena de cuestionamientos que dan cuenta del clima que se vive en Estados Unidos para con la administración Kirchner.
(*) Desde Washington, especial para Perfil.com