AFP/ANSA
Desde Asuncion
El posible sucesor de Federico Franco en la presidencia de Paraguay, proceso que marcaría el retorno al poder del Partido Colorado, no había participado en política hasta hace cinco años. El candidato centroderechista Horacio Cartes, un empresario que lidera las encuestas, a unos seis puntos porcentuales del liberal Efraín Alegre, que representaría la continuidad del proceso iniciado con la destitución de Fernando Lugo.
La confrontación, teñida de denuncias de corrupción, es entre el Partido Colorado y el Partido Liberal Radical Auténtico. Las encuestas dan unos 37 puntos a Cartes y unos 31 a Alegre, que proponía un “país decente” y uno “alegre”, como dice la publicidad con las que llegó a las elecciones.
El cierre de la campaña se vio enturbiado por denuncias cruzadas de fraude, con lo que la palabra “decencia”, adquiere un valor particular. Fue precisamente el Partido Colorado, quien denunció a la Junta Electoral paraguaya por haber filtrado las debilidades del sistema electrónico de recuentos de votos al Partido Liberal, lo cual encendió más un clima que, los días previos al comicio, crecía en temperatura.
Fernando Lugo también asiste al convite electoral. Pero no aspira a la presidencia de la nación, sino que va como candidato a senador por el Frente Guasú. La izquierda y la centroizquierda, que ganaron las últimas elecciones muestra la división –y la debilidad– que llevó a la caída del sacerdote que ejerciera la presidencia: Lugo apoya la candidatura presidencial de Aníbal Carrillo Iramaín. Pero la coalición Avanza País presenta al periodista televisivo Mario Ferreira, que en algún momento fue considerado el delfín de Lugo. Ninguna de estas expresiones tiene chances de vencer, si se da crédito a las encuestas preelectorales.
La presentación colorada no es la única que agitara el panorama preelectoral. Sobre Cartes existe una suerte de velo que liga su éxito empresario al narcotráfico. Y este ha sido uno de los argumentos más fuertes de campaña de Alegre. Lo cierto es que el candidato colorado no sólo ha manejado el equipo de fútbol. Es dueño de unas 25 empresas, incluyendo un banco y explotaciones agrícolas de tabaco y soja, en el norte paraguayo, una región en la que también existen plantaciones de marihuana, lo que abrió el marco para las sospechas que son un elemento fuerte en la campaña.
Cartes se ha presentado frente a los electores como una nueva perspectiva dentro de su partido, una nueva etapa del Partido Colorado. La base de su propuesta es la lucha contra la corrupción, a partir de una renovación de su partido y la denuncia de toda la clase política de su país.
Argumentos que en otros lugares del continente sudamericano han hecho sonar cacerolas.