El rey Juan Carlos I de España, de 75 años, fue operado hoy con éxito en el Hospital Universitario Quirón (Madrid), a las 21, hora madrileña, en lo que constituye la octava intervención quirúrgica a la que se somete en los últimos tres años y la número 13 en toda su vida.
La operación, de dos horas de duración, tuvo como propósito remover la prótesis de la cadera izquierda que se le implantó el año pasado tras una infección, noticia que reavivó las opiniones de españoles a favor de la abdicación del rey debido a su cada vez más problemático estado físico. La operación fue dirigida por el doctor Miguel Cabanela, cirujano traumatólogo de la prestigiosa clínica estadounidense Mayo.
El doctor Cabanela señaló que la infección en el tejido que rodea la prótesis -que se implantó en noviembre de 2012 por problemas de artrosis- se produce sólo en un 1 o 2 % de los casos. Si el proceso se hiciera en dos operaciones, en la primera se le quitaría la prótesis y se pondría una temporal, y en un plazo de dos meses, en una cirugía más sencilla, se le colocaría la prótesis definitiva.
"El estado anímico (del paciente) es muy bueno", declaró el jefe de los servicios médicos de la Casa Real, Miguel Fernández Tapia-Ruano. "Dada su personalidad ha reaccionado maravillosamente bien, ha aceptado esta marcha atrás en su proceso evolutivo, quiere atajar el problema cuanto antes y seguir adelante". "Después de seis semanas su capacidad motora será mucho mayor. Caminar normalmente le va a tomar más tiempo", agregó Cabanelas.
El doctor anunció que Juan Carlos de Borbón necesitará un periodo post-operatorio de entre dos y seis meses (necesitará antibióticos intravenosos cada día), por lo que no podría asistir a los actos de la Fiesta Nacional -el 12 de octubre- ni a la Cumbre Iberoamericana en Panamá -18 y 19 de octubre-, ausencias significativas que iniciaron un debate en la opinión pública española sobre si es necesario que el príncipe Felipe suplante a su padre en sus actividades oficiales.
No real. La Casa Real fue tajante sobre permanencia de Juan Carlos al frente de la jefatura del Estado: "La abdicación es un acto personalísimo del rey, y el rey no se ha planteado en ningún momento la abdicación", afirmó el portavoz de la Casa del Rey, Rafael Spottorno. "Tampoco ha lugar a plantearse la posible inhabilitación y la introducción de la fórmula de la regencia", agregó.
El estado de salud de Juan Carlos de Borbón se deterioró notablemente en los últimos años, camina apoyado con muletas después de implantarse prótesis en ambas caderas y se ha sometido a ocho operaciones desde 2010, aunque Cabanelas afirmó el viernes que "el estado general de su majestad es bastante mejor que el de la media de aquellos pacientes que yo opero de su edad. Es un hombre vigoroso que está bien para su edad".
Desde 2010, fue operado de un tumor benigno en el pulmón derecho, del tendón de Aquiles del pie izquierdo, de una luxación en la cadera derecha y de una hernia de disco en la columna lumbar, además de implantársele una prótesis en la rodilla derecha. En abril de 2012, se fracturó la cadera derecha después de una caída en Botswana, durante un viaje casi secreto, y hubo que implantarle otra prótesis.
Dado el precario estado de salud del monarca y la tormenta de escándalos en los que se vio envuelta su familia, un sondeo mostró que la mitad de los españoles opinan que don Juan Carlos debería abdicar en favor del príncipe de Asturias, que hasta ahora permanece ajeno a los escándalos y es uno de los miembros más populares de la Familia Real.
Este debate, además, se vio reforzado luego de que la reina Beatriz de Holanda y el rey Alberto de Bélgica abdicaran este año a sus respectivos tronos por considerarse ya mayores para ejercer sus funciones y porque piensan que la sangre joven revitalizaría a la monarquía. Don Juan Carlos -que lleva 38 años de reinado-, reiteró varias veces este año su decisión de seguir reinando hasta la muerte.
Los principales partidos políticos españoles -PP y PSOE- se muestran dispuestos a acordar una reforma constitucional que permita regular el papel del príncipe heredero durante los períodos de enfermedad del rey, y elaborar un estatuto que defina las funciones oficiales del príncipe de Asturias, de 45 años, y que sirva para los futuros herederos de la Corona. "Estaremos abiertos a debates, que no consideramos ahora mismo urgentes, si van en línea de fortalecer nuestras instituciones democráticas", dijo el portavoz del PP.
Otros políticos plantean abiertamente la abdicación, cosa que el rey y los funcionarios de la Casa Real rechazan, así como un referéndum entre monarquía y república: "Alguien debería pensar que cuando una de las instituciones más conservadoras del mundo, como el Vaticano, ha llegado a la conclusión de que no hace falta morirse para dejar de ser Papa, va a resultar que en España hace falta morirse para dejar jefe del Estado", señaló Joan Coscubiela, del partido catalán ICV.
"Nosotros lo que quisiéramos es un referéndum entre monarquía y república. Todavía está pendiente", dijo José Luis Centella, de Izquierda Unida, mientras que el diputado vasco Aitor Esteban (PNV) insinuó la posibilidad de que ha llegado la hora de una abdicación: "Hay unas funciones que son insustituibles, que son la sanción y promulgación, y no sé si en los próximos meses el rey va a ser capaz de llevar a cabo esas tareas".
(*) Especial para Perfil.com