Envejecidos, casi tal como se verían en 2020, varios líderes mundiales que participarán este mes en la cumbre sobre el clima en Copenhague aparecen en varios carteles publicitarios, con una leyenda en la que se simula que por esos años estarán pidiendo disculpas por no haber hecho nada para detener el cambio climático.
“Lo siento. Podríamos haber detenido un cambio climático catastrófico... pero no lo hicimos", dice la leyenda que acompaña el envejecido rostro del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y de sus pares de Francia, Nicolas Sarkozy; de España, José Luis Rodríguez Zapatero; de Alemania, Angela Merkel; y de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, entre otros jefes de Estado y líderes mundiales que tienen en sus manos el posible acuerdo para detener el cambio climático, según las organizaciones ambientalistas Greenpeace y tcktcktck, encargadas de la campaña publicitaria que se colocó en el aeropuerto de Copenhague, Dinamarca.
La campaña, informó la ONG en un comunicado, busca asegurar un acuerdo "justo, ambicioso y vinculante", durante la Cumbre climática que se celebrará a partir del 7 de diciembre. En los paneles puede verse a los jefes de Estado envejecidos gracias a una simulación fotográfica, que incluye una leyenda dirigida a ellos: “Actúa ahora: cambia el futuro”.
El director de Greenpeace Internacional y miembro del Consejo de tcktcktck.org, Kumi Naidoo, declaró que "si los líderes como Zapatero, Obama, Merkel y Brown no llevan a esta cumbre la voluntad de conseguir un acuerdo ambicioso contra el cambio climático, su legado será de hambrunas, migraciones masivas y miseria. Si esto pasa, las disculpas no serán suficientes", informaron varios medios internacionales.
También en Copenhague, unos 44 jóvenes activistas de Greenpeace, pertenecientes a 16 países, retan a los líderes mundiales a emprender acciones urgentes contra el cambio climático. Según la ONG, el éxito en Copenhague requerirá de un acuerdo que incluya un compromiso de los países industrializados para recortar sus emisiones en un 40 por ciento en 2020, un plan para acabar con la deforestación de los grandes bosques tropicales en 2020 y un mínimo de 140 billones de dólares anuales para financiar actuaciones contra el cambio climático en los países en desarrollo.