Agencias
La intensa purga lanzada por el presidente Recep Tayyip Erdogan tras el fallido golpe del 15 de julio se extendió ayer al mundo de los negocios con la detención de tres importantes empresarios.
Mustafa Boydak, presidente del conglomerado familiar Boydak Holding Company, fue arrestado en la ciudad de Kayseri, en el centro de Turquía.
Otros dos directivos del grupo, Sukru Boydak y Halit Boydak, fueron detenidos en sus casas. La policía buscaba ayer al presidente del grupo, Haci Boydak, contra quien también se emitió orden de arresto.
El grupo Boydak Holding tiene intereses en energía, finanzas y muebles, con marcas muy populares en Turquía, como Istikbal y Bellona.
El gobierno acusa al grupo de vínculos con el clérigo Fethullah Gülen, al que responsabiliza por el golpe.
Magnitud. El ministro del Interior, Efkan Ala, anunció ayer nuevas cifras que muestran la magnitud de esa “gran limpieza” tras la noche del levantamiento, que causó 270 muertos.
Hasta ayer, más de 18 mil personas fueron detenidas en algún momento. Cerca de 10 mil han sido perseguidas y puestas en detención preventiva, según el ministro, y 3.500 han sido liberadas. Además, unos 50 mil pasaportes fueron anulados, una “precaución contra el riesgo de fuga de terroristas”, precisó un responsable turco.
El primer ministro turco Binali Yildirim afirmó ayer que el ejército fue “limpiado” de elementos favorables al clérigo Gülen, enemigo público de Ankara. Para compensar el vacío dejado en la jerarquía del ejército, numerosos oficiales de rango inferior fueron rápidamente ascendidos
Junto al ejército, el mundo del periodismo ha sido el más afectado por estas purgas, que ayer continuaron en el sector: 21 periodistas detenidos comparecieron ante un tribunal de Estambul y la fiscalía solicitó prisión preventiva para veinte de ellos, y para Bulen Mumay, ex editor del diario Hurriyet, la libertad bajo fianza.Sus colegas se manifestaron ante el tribunal para apoyarlos.
Entre los detenidos figura Nazli Ilicak, ex diputada, que fue despedida del diario progubernamental Sabah en 2013 después de criticar a varios ministros relacionados con un escándalo de corrupción, orquestado, según Ankara, por Gülen.