Provocador: así puede definirse como mínimo al calendario laico 2010 del Colectivo de lesbianas, gays, transexuales, y bisexuales de Madrid (COGAM), repleto de imágenes que conjugan lo sagrado y lo profano de un modo más que irreverente al representar como vírgenes, ángeles y pastores cristianos a transexuales, travestis o figuras propias del cine "XXX".
Entre otras figuras alusivas a la iconografía cristiana, es posible ver por ejemplo a una "virgen" negra sosteniendo a un niño con una mano y una bola de discoteca con la otra, o a un transexual con tatuaje luciendo una túnica blanca como casi única prenda y emanando destellos de luz al mejor estilo de una personificación religiosa.
Como era de esperarse, el particular calendario ha sido considerado "muy ofensivo a la Iglesia" , "blasfemo" y "pornográfico" por organizaciones católicas españolas, que ya hablan de una "inquisición rosa". Sin embargo, ello no parece amilanar a la gente de Cogam, que considera este producto como una forma de denunciar la ausencia de un "auténtico estado laico".
En declaraciones al diario La Vanguardia, el portavoz de la asociación Raúl García expresó esos motivos diciendo: "En España hay ateos, judíos, testigos de Jehová, musulmanes, ¿por qué no celebrar festividades laicas como el día internacional de la mujer o de la democracia?".
Para García, lejos de ser ofensivo el calendario "es muy respetuoso". En tal sentido, el vocero agrega: "Tan sólo tomamos la iconografía actual, es un trabajo artístico. Hay cuadros en el Louvre o en el Prado que podría ser más ofensivos".
Por su parte, una de las modelos que aparece en las imágenes, Isable Torres, califica: "Es arte transgresor, contemporáneo; lo importante del calendario es su mensaje: el uso del condón y medidas anticonceptivas frente a posturas intransigentes que hacen un flaco favor a la sociedad".
Según el fotógrafo responsable de las secuencias, en tanto, el objetivo del calendario es "desenmascarar la realidad, encontrar matices distintos; puede agradar o horrorizar, pero es un antídoto frente a la pereza mental".
De la realización participaron también voluntarios y celebridades como la actriz Carla Antonelli, con el objeto de contribuir a una obra que permitirá recaudar fondos para campañas por la sensibilización ante el VIH-SIDA.