La política estadounidense Hillary Clinton se refirió a la famosa infidelidad de su esposo, el expresidente Bill Clinton, que provocó un escándalo político y sexual sin precedentes en Estados Unidos.
La exsenadora y secretaria de Estado declaró haber sido "valiente" por su decisión de no separarse de su marido luego de una serie de denuncias por conducta sexual inapropiada, incluyendo el amorío con una becaria de la Casa Blanca, Monica Lewinsky, por lo que el entonces presidente demócrata fue sometido a juicio político.
"Eso no significa que sea correcto para todos", admitió Hillary Clinton en el tráiler de su nueva serie de televisión llamado Gutsy, que se estrenará el próximo 9 de septiembre por Star+. En la pieza audiovisual Clinton habla con la reverenda Whittney Lijanaten, una referente religiosa que se especializa en matrimonios LGBTQ.
Hillary Clinton inauguró en Washington una embajada para todas las mujeres
"Tienes un matrimonio que ha estado en exhibición pública desde el principio. Dijiste que lo más valiente que hiciste fue permanecer en tu matrimonio", fue la consulta de la mujer. Clinton, quien recientemente se volcó al rubro del cine como productora, oficiará su show televisivo a partir de conversaciones con mujeres "valientes"
El Monicagate, la infidelidad que sacudió a Estados Unidos
En 1998, una mentira puso en jaque la legitimidad del expresidente de Estados Unidos, Bill Clinton, quien se convirtió en el segundo en la historia de ese país en haber sido sometido a un juicio político.
El motivo: un escándalo político sexual entre el exmandatario (de entonces 49 años) y Mónica Lewinsky, una joven becaria de la casa blanca. El romance extramatrimonial del 42 presidente de la primera potencia mundial salió a la luz tras las acusaciones de acoso sexual por parte de Paula Jones, luego de que una amiga de Lewinsky aportara pruebas al FBI.
A pesar de que la figura de la infidelidad no cayó bien entre los estadounidenses, fue una mentira lo que motivó el impeachment contra el demócrata, casado con Hillary Clinton desde 1975 y con quien tuvo a Chelsea, su única hija.
Ante la explosión del escándalo, conocido como "Monicagate", Clinton negó ese vínculo mintiendo ante los medios y ante el Congreso, lo que provocó una mediática investigación por parte del partido Republicano (opositor) que ocupó las revistas en los noventa. En sus declaraciones, quien fue el segundo demócrata en renovar su mandato negó haber mantenido un vínculo sexual con Lewinsky, pero tuvo que retractarse el 17 de agosto de 1998 ante las pruebas de ADN en el vestido de la mujer.
En tanto, la escalada de la polémica en torno a la aventura extramarital y la investigación resultante llevaron al juicio político por perjurio del presidente Clinton por la Cámara de Representantes de los Estados Unidos. El presidente Clinton admitió en un testimonio, grabado ante el gran jurado el 17 de agosto de 1998, que había tenido una "relación física inapropiada" con Lewinsky.
Finalmente, tras 21 días de juicio el Senado exoneró al exmandatario de todos los cargos de perjurio y obstrucción de justicia. "Lo que hice es inexcusable", sostuvo décadas más tarde Clinton, y atribuyó el affaire a las "presiones" que sentía como inquilino de la Casa Blanca.
cd / ds