Un hombre de 74 años murió luego de que más de 15.000 ruedas de queso Grana Padano se le cayeran encima como consecuencia del desplome de una estantería metálica dentro de un almacén en Italia. El dominó mortal acabó con la vida de Giacomo Chiapparini, quien era el propietario de la granja.
El trágico accidente se produjo este domingo 6 de julio, minutos antes de las 21hs, en las instalaciones de una empresa italiana en Romano di Lombardia. En concreto, se trataba de un almacén de maduración de quesos Grana Padano, dentro del cual, por causas aún desconocidas, se desplomó una estantería, lo que provocó que todas las demás se hundieran.
Como consecuencia del derrumbe, los bomberos de Bérgamo asistieron al lugar y allí encontraron muerto a Giacomo Chiapparini, dueño del lugar. El mismo había ingresado con el objetivo de programar un robot que gira automáticamente los quesos para asegurar su correcta maduración.
El almacén donde ocurrió la tragedia esta constituido por 10 pasillos y en cada uno de ellos se conservan 1.600 quesos, al derrumbarse todos a la vez, estos aplastaron al hombre, padre de dos hijos y abuelo de varios nietos, y terminaron con su vida.
Tras el impactante estruendo producido por el derrumbe, el hijo del granjero alertó sobre la situación y algunos empleados que estaban en el lugar se encargaron de levantar la alarma y pedir ayuda. A la granja llegaron 21 unidades de equipos de bomberos en conjunto con los servicios de emergencias y agentes del equipo Usar (Búsqueda y Rescate Urbanos).
La compañía de Chiapparini se dedica a la producción de Grano Padano desde 2006, procesando la leche de sus propios animales y comercializando sus quesos en un punto de venta propio.
"Siempre hemos sido productores de leche. Mi padre Giacomo, el último de 7 hermanos, trabajó durante años con su padre y sus dos hermanos como aparcero antes de establecerse por su cuenta, ganando con su trabajo su primera granja y algunas tierras", relató al respecto Mary, hija del propietario, según informó El Mundo.
Fue en 1977 cuando Chiapparini se separó de sus hermanos y con un parte, 26 cabezas de ganado, un tractor, una excavadora, medio cobertizo y algunas tierras, inició su propio camino. En principio vendía materia prima a grandes compañías, luego, gracias a la calidad de sus productos, logró formar su propia empresa.
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