INTERNACIONAL

La compañía del crucero accidentado también apunta contra los "errores" del capitán

El fiscal acusó el conductor Francesco Schettino de acercarse de "forma torpe" a la isla y ahora la firma propietaria del barco remarca sus "graves errores de juicio".

Investigan si el comandante abandonó el buque antes que sus pasajeros.
| EFE

La compañía propietaria del Costa Concordia, cuyo naufragio cerca de la isla italiana de Giglio causó al menos cinco muertos, acusó este domingo al comandante de haber cometido "errores" en la ruta del navío y en la gestión de la emergencia.

"Acusaciones gravísimas pesan" sobre el comandante Francesco Schettino, recordó el líder europeo de cruceros, en un largo comunicado difundido por la noche. Acusado de homicidios múltiples y de abandono del navío, el comandante se encuentra detenido en Grosetto.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

"Parece que el comandante cometió errores de juicio que tuvieron graves consecuencias" y que "sus decisiones en la gestión de la urgencia no han seguido los procedimientos de Costa Cruceros, acordes con los estándares internacionales", añade.

La compañía afirma, no obstante, que el comandante realizó todos los programas de formación requeridos, así como los miembros de la tripulación e incluso los pasajeros, que realizan un ejercicio de evacuación durante las 24 horas que siguen al embarque".

"La trayectoria seguida por el crucero no era buena", afirmó el fiscal de Grosseto, Francesco Verusio. El comandante "se acercó de forma torpe a la isla de Giglio, e impactó contra una roca que se encastró en el lado izquierdo, haciendo inclinarse (el barco) y entrar una enorme cantidad de agua en dos o tres minutos", añadió.

Y confirmó que había abandonado el barco "mucho antes de que fueran evacuados todos los pasajeros". Numerosos testigos y guardacostas destacaron también que el barco navegaba demasiado cerca de las costas de la isla de Giglio, situada frente al litoral del sur de la Toscana.

Saludo inapropiado. Según algunos, el crucero estaba haciendo una maniobra llamada "l'inchino", "reverencia" en italiano, con todas las luces y las sirenas activadas, para saludar a los 800 habitantes de la isla de Giglio.

Las informaciones recabadas apuntan a que en ese momento el comandante maniobró para acercar el barco al puerto de la isla, hasta finalmente volcar a unos 50 metros de la orilla. La caja negra con los datos sobre la trayectoria fue encontrada hoy, y se espera que arroje luz sobre ese punto, informó la agencia AFP.