Agencias
A tres días del vencimiento del plazo formal para llegar a un acuerdo, las negociaciones sobre el programa nuclear iraní avanzan, aunque persisten “algunos problemas importantes”, reconoció ayer Abbas Araghchi, uno de los principales negociadores de Teherán.
“El trabajo se lleva a cabo difícil y lentamente”, dijo Araghchi en Viena, donde los expertos de Irán y los del grupo 5+1 (China, Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Rusia y Alemania) intentan alcanzar un acuerdo final sobre el programa nuclear iraní.
Según medios iraníes, las divergencias están relacionadas con los plazos para el levantamiento de las sanciones occidentales, la inspección de las instalaciones militares y la magnitud del programa de investigación del país.
El canciller iraní, Mohamad Javad Zarif, afirmó que su país quiere un “acuerdo digno y rechaza las peticiones excesivas”.
Por su parte, negociadores occidentales afirmaron que la resolución de puntos cruciales del programa nuclear iraní “sigue siendo extremadamente problemática”.
“Transparencia, inspecciones, fin de las sanciones, posible dimensión militar (del programa nuclear): son los temas más difíciles que deben ser solucionados en los próximos días”, indicó la fuente.
Plazos. Después de veinte meses de negociaciones, ambas partes fijaron el 30 de junio como fecha límite para firmar un acuerdo definitivo que garantice que el programa nuclear iraní tenga un carácter meramente civil, a cambio de que se levanten las numerosas sanciones internacionales que pesan sobre su economía desde 2005.
El sábado pasado, un responsable estadounidense admitió por primera vez que las negociaciones podrían extenderse unos días después del 30 de junio.