“El 1° de enero de 2021 tomaremos de nuevo el control y recuperaremos nuestra independencia política y económica”, anunció ayer el viceprimer ministro, Michael Glove, al confirmar que Londres no pedirá ninguna prórroga para completar el proceso del Brexit, la salida del país de la Unión Europea.
Con la comunicación “formal” de Londres de que no pedirá que se extienda el plazo fijado para el 31 de diciembre para completar su salida del espacio comunitario, la UE asumió el dato como “definitivo”, aunque advirtió que las negociaciones deben ser más ágiles porque queda muy poco tiempo.
Gove se reunió por videoconferencia con el vicepresidente comunitario Maros Sefcovic, encargado de supervisar junto al británico la correcta puesta en práctica de las condiciones del Brexit pactadas en el acuerdo de divorcio.
Bruselas subraya que esas condiciones deben estar ya cumplidas el 1° de enero del próximo año como condición para que se produzca una salida ordenada y se pueda aplicar el marco de relación futura en el proceso de negociación.
El responsable comunitario, por su parte, confirmó que Gove fue “muy claro, inequívoco”, sobre el hecho de que el gobierno de Boris Johnson no pedirá aplazar la salida, por lo que sostuvo que el bloque toma esta decisión como “definitiva”.
El acuerdo de salida establece este mes de junio como plazo último para decidir retrasar de nuevo la ruptura, prevista para el próximo 31 de diciembre cuando expire el período transitorio, por lo que Sefcovic concluyó que es momento de “dar por cerrado el debate”, de si Londres pedirá o no esa prórroga.
Tiempo. Bruselas venía avisando sobre la falta de avances en las negociaciones para diseñar la relación futura con Londres y días atrás, la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, había dicho que la UE estaría dispuesta a conceder un nuevo plazo de entre uno o dos años, escenario que ahora Londres rechazó de plano.
Ayer, Sefcovic advirtió que el tiempo sigue corriendo y que es urgente avanzar en las negociaciones para lograr resultados tangibles, algo que no se ha logrado en las primeras rondas de contactos, pese a que el acuerdo debería llegar antes de octubre, para dar tiempo a la tramitación legal y ratificación del texto a tiempo para que pueda entrar en vigor el 1° de enero de 2021.
Con las conversaciones prácticamente en punto muerto, el lunes Johnson se reunirá por videoconferencia con los presidentes de las tres principales instituciones comunitarias: Ursula von der Leyen (Comisión), Charles Michel (Consejo) y David Sassoli (Parlamento europeo).
Se trata de una conferencia de alto nivel prevista ya en el acuerdo de divorcio para hacer balance de la transición y de los avances para el marco futuro, pero se ve también como una oportunidad para desbloquear las conversaciones, a las que Bruselas se ha quejado que Londres acude sin voluntad de alcanzar compromisos.
