INTERNACIONAL
la politizacion de la epidemia

Obama, Rajoy y OMS en el ojo de la tormenta por la crisis del Ebola

A días de las elecciones legislativas, los republicanos criticaron la “lenta” respuesta del presidente de EE.UU. Por qué se trata de una “tormenta perfecta” que nadie previó.

Acorralado. El mandatario suspendió la campaña a favor de los candidatos demócratas y encabezó un comité de emergencias.
| Cedoc Perfil

La crisis sanitaria mundial que provocó el virus del Ebola amenaza con convertirse en un dolor de cabeza para líderes políticos de todo el mundo. Barack Obama y Mariano Rajoy fueron los mandatarios más cuestionados en las últimas horas, por su tibia reacción ante la irrupción de casos de Ebola en Estados Unidos y España. Pero las críticas llegaron también al seno de la Organización Mundial de la Salud (OMS), al conocerse ayer que hubo fallos en la contención del brote en Africa, que dejó 4 mil muertos.
La agencia admitió en un documento interno que ninguno de sus expertos supo prever la “tormenta perfecta” que se gestaba en países con frágiles sistemas sanitarios y fronteras permeables. Aunque luego la OMS dijo que se trataba de un borrador preliminar, luces de alarma se encendieron en las capitales de todo el mundo.

A veinte días de las elecciones legislativas, los republicanos y la prensa norteamericana sensacionalista sostuvieron que se trata del “Katrina” de la presidencia de Obama, que tiene un 40% de popularidad, su cuota más baja desde que llegó a la Casa Blanca. Ante el oportunismo político de sus adversarios, el jefe de Estado nombró a Ron Klain nuevo zar en la lucha contra el Ebola y llamó ayer a la tranquilidad a sus compatriotas. “Es una enfermedad seria, pero no podemos entregarnos a la histeria, el miedo o aislarnos del oeste de Africa. Tratar de sellar una región entera del mundo podría empeorar la situación”, dijo Obama, que pidió fondos de emergencia al Congreso.

Su prédica no logró aplacar la psicosis colectiva que se expandió desde Texas al resto del país. Para The New Yorker, el Ebola es “una pesadilla para Obama”. “Si, en las próximas semanas, más casos aparecen en territorio norteamericano, la discusión política podría ponerse muy fea”, escribió en esa revista el periodista John Cassidy. The Washington Post apuntó a la “politización del Ebola”, al describir las críticas lanzadas por el Tea Party.

En Madrid, Rajoy desplazó a su ministra de Salud, Ana Mato, del comité de emergencia, tras recibir duras críticas por la lenta respuesta oficial. Una buena noticia llegó ayer, cuando se conoció que la enfermera Teresa Romero evolucionaba “favorablemente” y que las 15 personas internadas no tenían síntomas.

El letal virus amenaza con cobrarse en las próximas horas sus primeras víctimas políticas.