La presidenta Cristina Fernández de Kirchner encabezó este martes la reunión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que la Argentina preside hasta septiembre próximo, donde se debate sobre la cooperación de la ONU con organizaciones regionales y subregionales en el mantenimiento de la paz y en un almuerzo brindó por los derechos humanos. Más temprano, habló de la "necesidad" de "revisar" esta institución, al considerar que "sigue con la lógica de la Guerra Fría".
"La globalizacion hoy es una garantía para hacer más vigente y profundizar la política de derehos humanos", señaló la mandataria en un almuerzo, tras encabezar esta mañana la reunión que integrada por los cinco miembros permanentes (China, Francia, Rusia, Reino Unido y Estados Unidos) y por lo diez no permanentes, de los cuales nuestro país forma parte (Australia, Azerbaiyán, Guatemala, Luxemburgo, Marruecos, Pakistán, Corea, Rwanda y Togo).
“El instrumento adecuado siguen siendo los Estados para poder llevar estas políticas. Quiero brindar por el éxito de estos debates”, agregó, al levantar la copa ante los presentes que levantaron la copa también. Y luego, volvieron a sesionar.
Más temprano, durante el debate, destacó la necesidad de "revisar el funcionamiento de las instituciones de la ONU, en particular del Consejo de Seguridad, que sigue con la lógica de la guerra fría". E instó a "repensar el funcionamiento de los organismos ante un nuevo mundo, una nueva realidad, que no se puede enfrentar con viejos instrumentos".
El objetivo de la agenda y "orden del día" era tratar la cooperación de las organizaciones regionales (como Unasur, Celac, Liga de Estados Árabes y la Unión Africana) con las Naciones Unidas en el mantenimiento de la paz. Y si bien encontró total apoyo de países como Guatemala y Marruecos, no fue así por parte de los países permanentes, los que tiene poder veto, como Reino Unido y Rusia.
La jefa de Estado afirmó que el debate abierto del Consejo de Seguridad “seguirá considerando el rol de las organismos regionales y subregionales, explorando acciones para fortalecer las relaciones bilaterales entre las Naciones Unidas y estas asociaciones”.
La Presidenta habló en la apertura del debate abierto sobre la "Cooperación de las Naciones Unidas con organizaciones regionales y subregionales en el mantenimiento de la paz y seguridad internacionales", en la sede de la ONU en Nueva York, cuya apertura fue transmitida desde la Casa de Gobierno.
De la deliberación, que se inició a las 10.55 (las 9.55 de Nueva York) y avanzará sobre la cooperación entre la ONU y organismos regionales y subregionales, participan además el canciller Héctor Timerman y otros catorce ministros de Relaciones Exteriores.
Al comienzo del debate el Secretario General de las Naciones Unidas, Ban ki-moon, dijo: "Este debate es una oportunidad muy positiva para estudiar estos desafíos y ver cómo mejorar la cooperación. Nuestras respectivas virtudes tienen un valor combinado".
Estuvo presente en el inicio del encuentro el secretario general de las Naciones Unidas, el surcoreano Ban-Ki-moon, quien había mantenido ayer una entrevista con Cristina Fernández, quien le anticipó su posición favorable a modificar el Consejo de Seguridad.
El representante diplomático de Reino Unido aseguró que este tipo de cooperaciones "ya está creada en el capítulo 8 de la Carta de las Naciones Unidas". Y asestó: "La cuestión de la capacidad de cooperación (de los organismos como Unasur) debe considerarse de manera realista. Tienen la voluntad política pero no los recursos. Se vió en Mali, que debió intervenir Francia".
En paralelo, Rusia acusó a estar organizaciones de "dejarse llevar" por la voluntad política o intereses de algunos de sus Estados miembro. "Estas organizaciones no deben recibir demasiadas presiones de los miembros que quizás estén siguiendo sus propios programas", dijo con una sonrisa irónica el representante de Moscú. "Las operaciones de paz deben ser supervisadas por la ONU. Para que tengan legimitidad sólo se pueden hacer desde el Consejo de Seguridad", concluyó.
Ayer la Presidenta se refirió al tema, destacando que por primera vez participará la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), presidida pro-témpore por Cuba. Lo expresó tras la reunión que mantuvo con Ban ki-moon en el en la sede central de Naciones Unidas en Nueva York.
En el encuentro, la mandataria también resaltó la "intervención" y "eficacia" tanto de la Celac como de la Unasur en la resolución de conflictos en la región en los últimos años. "Venimos sosteniendo en el marco de la Asamblea General (de la ONU) la eficacia de esos organismos multilaterales para ser auténticos intermediarios en los conflictos y poder resolverlos con resultados positivos para todos", reflexionó.
En contraste, la Presidenta volvió a marcar la necesidad de que se "reforme" el Consejo de Seguridad, "no con la óptica de sólo ampliar el número de miembros permanentes, sino realmente elegir un método de funcionamiento diferente".
Al mediodía, en el intervalo de las deliberaciones del Consejo de seguridad de la ONU, la Presidenta ofrece un almuerzo oficial en un restaurant ubicado en las cercanías de la sede de Naciones Unidas, del que participan el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon; cancilleres, representantes de los países miembros del Consejo de Seguridad y de organizaciones regionales.
Por la noche, la Presidenta da por cerrada su agenda en Naciones Unidas y emprende su regreso a Buenos Aires.
