INTERNACIONAL
AMOR A LA FRANCESA

Sarkozy quiso dejar a Bruni y volver con la ex

Así lo revela un SMS que le escribió el presidente francés a su ex esposa Cécilia ocho días antes de su boda con la ex modelo italiana. “Si vuelves, lo anulo todo”, le escribió, pero ella nunca respondió.

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| AFP

A pocos días de haberse casado con Carla Bruni, la obsesión del presidente francés Nicolas Sarkozy sigue siendo su ex esposa Cécilia, a quien le habría mandado un mensaje de texto ocho días antes de su boda pidiéndole que vuelva.

"Si vuelves, lo anulo todo", dicen que le escribió Sarkozy a Cécilia, pero ella nunca respondió, informó el diario español El País, que cita al semanario francés Nouvel Observateur. Además, pone en duda que el presidente francés se haya casado con Bruni por amor, al preguntarse hasta dónde no se trató de una venganza.

Según el semanario francés, las apariciones de Sarkozy con la ex modelo, con quien finalmente se casó el 2 de febrero último, tuvieron mucho que ver con la obsesión que todavía tiene el presidente por su ex esposa, quien se casará el próximo mes con el que fue su amanta, el publicista Richard Attias.

Las conjeturas las realiza luego de recordar que Sarkozy le regaló a Bruni un anillo idéntico al que le regaló a Cécilia, que también viajó con ella a Petra, Jordania, lugar donde su ex esposa estuvo con su amante.

Además -recalca el semanario- el presidente no fue muy lejos del entorno de su ex mujer para elegir testigo para su boda con la cantante: eligió nada más y nada menos que a Carla de Mathilde Agostinelli, directora de comunicación de Prada y durante mucho tiempo amiga íntima de Cécilia.

" Adopte el rostro del amor o del odio, la verdadera obsesión de Nicolas Sarkozy ha sido y sigue siendo Cécilia Sarkozy ", señala Nouvel Observateur, que cuenta además que el entorno de Sarkozy quiere aconsejarle a Sarkozy que no lleve a Carla a Guyana, lugar donde se gestó la reconciliación con Cécilia, pero nadie se atreve a decírselo abiertamente.

"Para estas cosas está en su burbuja. No escucha. Lo que es peor, no quiere escuchar nada", asegura una persona cercana al presidente. La publicación cuenta también que durante la boda con Bruni muchos testigos no vieron muy feliz al jefe del Estado.