INTERNACIONAL

Sin temor a la radiación, un hombre fotografía zonas de desastres nucleares

El polaco Arkadiusz Podniesiński muestra en su sitio web impactantes imágenes de los lugares afectados.

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El polaco Arkadiusz Podniesiski muestra en su sitio web impactantes imgenes de los lugares afectados. | podniesinski.pl

Arkadiusz Podniesiński es un fotógrafo polaco que viajó a Japón en septiembre y, mediante su página web, cuenta y muestra con sus imágenes cómo está la zona de Fukushima luego del desastre nuclear ocurrido en 2011. El hombre también estuvo en Chernobyl en 2008.

“Cuando visité Chernobyl por primera vez hace 7 años, no pensé que un desastre similar podría tener lugar en cualquier lugar nunca más, y ciertamente no en Japón”, relata el fotógrafo, y agrega: “Pero sucedió. Cuando planeé mi viaje a Fukushima no sabía qué esperar, y lo que podría encontrar allí cuatro años después del accidente? ¿Sería algo similar a Chernobyl?”, relata en su sitio el fotógrafo.

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“Este documental fotográfico no pretende contar la historia de los acontecimientos que rodearon el desastre una vez más(...) El desastre pudo haberse previsto ningún e impedido. Como en el caso de Chernobyl, que era un ser humano, no la tecnología, que fue el principal responsable de la catástrofe. Como se verá en breve, los dos desastres tienen mucho más en común”, agrega. 

Fukushima. “Inmediatamente después de la catástrofe en la central nuclear un área de 3 km, y más tarde de 20 km, se designan de la que fueron evacuados por la fuerza a unos 160 000 habitantes. Caos, y un sistema ineficiente de monitoreo los niveles de radiación, dieron lugar a muchas familias están divididas o evacuados a lugares donde la contaminación fue aún mayor”.

“Al igual que en Chernobyl, algunos residentes desafiaron la orden de evacuar y regresaron a sus casas poco después del desastre. Al entrar en la zona, lo primero que se nota es la enorme escala de los trabajos de descontaminación. Veinte mil trabajadores limpian cuidadosamente cada pieza de suelo. Ellos son la eliminación de la parte superior, la capa más contaminada del suelo y ponerlo en sacos, que se ejecutará a uno de varios miles de vertederos. Los sacos están en todas partes. Se están convirtiendo en una parte permanente del paisaje de Fukushima”, relata Podniesinski.