En una jornada cargada de simbolismo y tradición, el papa León XIV formalizó este domingo su condición de obispo de Roma al tomar posesión de la basílica de San Juan de Letrán, considerada la “Madre de todas las iglesias” y sede episcopal del pontífice. Con este acto, culminó su asunción en las cuatro basílicas pontificias de la capital italiana.
El memorial a Francisco en la Catedral Metropolitana, en honor al “Papa del Pueblo”
“Hoy puedo decir para ustedes y con ustedes: ¡Soy romano!”, expresó el Papa, visiblemente emocionado, al confirmar su nuevo rol ante los fieles y autoridades civiles. Horas antes, fue recibido por el alcalde de Roma, Roberto Gualtieri, en el Capitolio, quien destacó: “La paz es la más poderosa vocación universal de Roma”, en alusión al mensaje pacifista que León XIV ha repetido desde su elección el pasado 18 de mayo.
En su homilía en San Juan de Letrán, León XIV pidió que la cátedra episcopal inspire “ternura, disponibilidad al sacrificio y esa capacidad de escucha que permite no sólo socorrer, sino prever las necesidades y expectativas, antes incluso de que se formulen”.
León XIV pidió paz, caridad, unidad de la Iglesia y criticó "la economía que margina a los pobres"
Tras la misa, el Papa se trasladó a la basílica de Santa María la Mayor, donde está sepultado su predecesor, el papa Francisco, fallecido el 21 de abril a los 88 años. Desde allí, León XIV volvió a hacer un llamado a la paz: “Pedimos valor y perseverancia para cuantos están comprometidos en el diálogo y en la búsqueda sincera de la paz”.
Más temprano, y ante más de 35 mil fieles congregados en la plaza de San Pedro, el pontífice había presidido su primer Regina Coeli desde la ventana del Palacio Apostólico. “Nuestra oración abarca todos los pueblos que sufren a causa de la guerra. Invocamos coraje y perseverancia”, expresó sin mencionar conflictos específicos, aunque continuando con el tono conciliador que caracterizó a Francisco.
León XIV, nacido en Estados Unidos bajo el nombre de Robert Prevost, también recordó a la Iglesia en China, que celebró el sábado un día especial de oración. “Recen para que los católicos de China estén en comunión con la Santa Sede”, pidió, en referencia a la delicada relación entre el Vaticano y el régimen chino.
San Juan de Letrán, ubicada cerca del Coliseo, es una basílica fundamental para la Iglesia desde sus inicios. Construida hacia el año 320, ha sido testigo de coronaciones papales, concilios históricos y fue sede de los papas hasta su traslado al Vaticano. A lo largo de los siglos, ha sido reconstruida en varias ocasiones y alberga tesoros artísticos de gran valor.