El actor cómico y novato en política, Volodimir Zelenski logró el domingo una abrumadora victoria en la elección presidencial de Ucrania ante el presidente saliente Petro Poroshenko, reflejando la desconfianza de los electores frente al poder. Aunque todavía no están los números oficiales, los sondeos a boca de urna son arrolladores y hasta el propio Poroshenko ya admitió su derrota y felicitó a su adversario por su triunfo en la presidencial.
El humorista de 41 años habría obtenido 73,2% de los votos en la segunda vuelta de la presidencial, contra 25,3% para sur rival, de 53, según los sondeos realizado a la salida de los colegios electorales por el consorcio "Exit Poll National", que agrupa a tres institutos.
"Nunca los decepcionaré", prometió Zelenski desde su comando de campaña de campaña, donde rápidamente apareció para agradecer a sus partidarios, antes de dirigirse a "todos los países del espacio postsoviético: "Miradnos. Todo es posible!".
Zelenski se impuso al cabo de cuatro meses de una inusual campaña realizada principalmente en redes sociales.
Los resultados oficiales se irán publicado durante la noche del domingo por la Comisión Electoral, que a media jornada había estimado la participación de votantes en el 45%. Zelenski, elegido este domingo presidente de Ucrania, es novato en política aunque ya fue 'presidente', pero en la pantalla, en una serie de televisión titulada "Servidor del pueblo".
Conocido sobre todo por sus espectáculos de monólogos, Zelenski, de 41 años, se benefició del descontento de los ucranianos con sus élites, consideradas corruptas e ineficaces, y por la decepción que deja el levantamiento prooccidental de la plaza Maidán, hace cinco años, que llevó al presidente saliente, Petro Poroshenko, al poder.
Padre de dos hijos y diplomado en derecho, Zelenski es originario de la ciudad industrial de Kryvy Rig, en el centro del país. Pero hizo carrera en los escenarios y en la pantalla, en espectáculos humorísticos y conocidas películas en Ucrania y también en Rusia. Este rusoparlante, de ascendencia judía, indicó que considera a la religión como un asunto privado.
AFP/H.B.