Con fuertes términos despectivos y descalificativos, se despachó el exconductor del ciclo kirchnerista 678 Carlos Barragán luego de que el medio online de la periodista María Julia Oliván, Border Periodismo, informara sobre las presuntas cifras millonarias que reclamarían los ex miembros del programa de la TV Pública y de programas en radio nacional en calidad de indemnizaciones.
En la mañana de este martes, Perfil.com se comunicó con Edgardo Mocca -uno de los demandantes- y se pudo confirmar que las acciones judiciales fueron efectivamente realizadas en el marco de la legislación laboral vigente, pero negó que las cifras sean de la magnitud referenciada en el portal de noticias.
Hoy se suma al repudio Barragán, quien describió a Oliván como una "persona insegura" y "desesperada" que "realiza tareas miserables" en presunta concordancia con "Hernán Lombardi" a quien le "hace los mandados".
En una carta pública escrita en su página de Facebook, Barragán se despachó: "María Julia Oliván es una persona insegura que vivió desesperada por seguir siendo una periodista independiente durante el kirchnerismo. Hizo bien. Porque si no hubiera sido tan independiente hoy no podría ser una periodista oficialista ahí en Radio Nacional. Y no podría estar haciéndole los mandados a Hernán Lombardi con esta nueva operación macartista sobre los mismos que fuimos perseguidos y prohibidos por este gobierno autoritario, y decidimos reclamar nuestros derechos laborales. (Derechos que todavía existen.)".
"Oliván tiene una gran vocación por las tareas miserables, quizá porque a todos nos gusta hacer lo que mejor nos sale. Lombardi debe haberle dado la información para que la publicara en su paginita de internet, la cual fue inmediatamente levantada por Clarín. Una carambola fácil y que siempre resulta. Por si hace falta aclarar, aparecen allí unos números que supuestamente reclamamos y que no existen", denunció el exconductor del ciclo K.
Y anunció: "Recién me llamaron de la producción de un programa de Canal 13 que tiene Ángel de Brito. Me dijeron que van a 'tocar el tema', y me invitaron por si yo quería salir a responder. Preferí no salir. Pensé que mejor es que me linchen sin participar del linchamiento".
"Y pensé en ustedes, en no escribir nada sobre este tema, como me recomienda la gente que todavía me quiere. Traté de hacer caso, así que busqué un cuento para compartirles, y al final hice un poco de trampa y escribí lo que escribí. Porque sé que me van a castigar junto a mis compañeros de trabajo y eso no me gusta y me preocupa. Porque alientan el odio, nos marginan, nos persiguen, nos ponen en una vidriera para que nos peguen y nos insulten".
Por último, en otro mensaje de Facebook escribió: "Gracias por todo lo lindo que me escriben, y por hacerme saber que no estoy solo, que de paso sirve para que todos sepamos que ninguno de nosotros está solo. Y que el odio y la saña que tienen para perseguir lo que odian no es su remedio, sino su enfermedad".