En medio de crecientes tensiones en el sector de los combustibles, las estaciones de servicio anuncian un cierre como señal de protesta y medida preventiva para evitar el desabastecimiento. Según informó Nuria Am en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9).
Las estaciones de servicio de Argentina han anunciado su decisión de cerrar durante la noche como medida preventiva para evitar el desabastecimiento y como señal de protesta por la situación crítica que afecta al sector de los combustibles en el país.
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La controversia se desató la semana pasada cuando trascendió la noticia del inminente aumento de los precios en los surtidores por parte de las compañías petroleras.
A diferencia de lo que es una práctica común, donde YPF generalmente lidera con los incrementos seguidos por otras empresas del sector, en esta ocasión las demás petroleras no esperaron. Ya para las dos de la tarde, se observaron aumentos en las estaciones de servicio de diversas compañías, lo que desencadenó una serie de reacciones.
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Desde el Ministerio de Economía se activaron las alarmas y se convocó a una reunión con representantes de la industria. Durante el encuentro, se planteó una propuesta:
congelar los precios de los combustibles hasta el 31 de octubre a cambio de autorizar un aumento solicitado del 12,5%. Un pacto delicado que busca equilibrar las necesidades del mercado y el impacto en la economía de los consumidores.
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Sin embargo, la magnitud del aumento acumulado a lo largo del año, superando el 50%, ha generado fuertes cuestionamientos y preocupaciones en torno a la inflación general del país. La nafta se ha convertido en un indicador de la tensión entre la realidad económica y la accesibilidad de los ciudadanos a los productos esenciales.
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Una situación adicional complica aún más el panorama: el aumento experimentado por los consumidores de nafta al por mayor es aún más pronunciado. Esto ha llevado a los mayoristas a buscar alternativas para aprovisionarse, a menudo acudiendo a las estaciones de servicios minoristas. Este flujo desequilibrado ha dado lugar a un peligroso desabastecimiento en el mercado minorista.
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Ante este escenario crítico, la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (CECHA), que agrupa a un gran número de estaciones de servicio, ha anunciado una medida drástica.
Las estaciones de servicio en todo el país cerrarán durante las horas nocturnas en señal de protesta y como una manera de prevenir un eventual desabastecimiento. Esta medida, que se presenta como una última instancia, podría convertirse en una realidad inminente si no se logra un cambio en la postura adoptada tras la reunión con el Ministerio de Economía.
VF FM
