MODO FONTEVECCHIA
Elecciones en Francia

Mario González: "Con medidas ilegales y anticonstitucionales, no se puede decir que la extrema derecha es centrista"

El concejal en París conversó con Jorge Fontevecchia en "Modo Fontevecchia", por Radio Perfil (FM 101.9), sobre la situación política en Francia.

debate elecciones francia Emmanuel Macron Marine Le Pen g_20220421
Francia. El debate presidencial entre Emmanuel Macron y Marine Le Pen. | AFP

Mario González, concejal en París e hijo del cantante Jairo, conversó con Jorge Fontevecchia en Modo Fontevecchia para Radio Perfil (FM 101.9) sobre la situación política en Francia.

¿Qué pasó que el Partido Socialista que se fue achicando tanto, y si, de alguna manera, el 22% de Jean-Luc Mélenchon es un continuador de aquellos votos del socialismo?

Cuando un partido de gobierno histórico como el Partido Socialista, que tiene una existencia de más de cien años, pasa de tener la presidencia de 2002 a 2017 a llegar al 1,7% de los votos en 2022, esto está causado por movimientos que vienen arrastrándose desde hace varios años, de incoherencias, de divisiones muy fuertes dentro del partido socialista.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Una parte de centroizquierda está muy apegada a principios macroeconómicos de equilibrio, de controlar la deuda, de tener una política social, basada en un aparato productivo exigente y dinámico. Por el otro, hay una izquierda más radical, basada en la protección social, en la condición obrera y orientada hacia las clases populares. Las dos corrientes tenían el mismo objetivo: la emancipación de los seres humanos y permitir, a través del progreso social y económico, el bienestar de todos. Pero las prioridades difieren.

Juan Dillon: "Emmanuel Macron puede ganar las elecciones en Francia, pero peligra la gobernabilidad"

Una gran parte de los socialistas se fueron hacia Macron y otra gran parte se han ido hacia Mélenchon. El 22% no es la continuación del voto socialista, hay una parte de la izquierda radical y una parte de un electorado que se considera de izquierda que no vota por el Partido Socialista, pero que sin embargo quiere tener un voto útil. La izquierda es un partido que está en ruptura con el Partido Socialista, porque no deja de ser una izquierda radical con posiciones muy fuertes sobre Europa, sobre el comunitarismo, etc.

¿Tenés alguna forma de poder traducir la política francesa como una tendencia de lo que ves en Argentina con el radicalismo?

Son muy distintos, la historia del radicalismo no es la del socialismo. En Francia hay un Partido Radical, que existió allí hasta la segunda mitad del siglo XX, para luego desaparecer de forma definitiva con el Partido Socialista. 

Macron se une a la propuesta de Sánchez para impulsar una reforma eléctrica europea

Son historias muy distintas, no creo que se pueda comparar, pero sí en el punto en que logran existir en una dimensión local, lo que a priori le estaría pasando al partido socialista. A nivel nacional el socialismo obtiene pocos votos, pero a nivel local mantiene intendencias y áreas de gobierno territoriales. Es un paralelismo entre el socialismo y el radicalismo.

¿Cuánto influye el corrimiento de socialistas hacia Macron? ¿Cuánto influye esa fatiga democrática o la decepción de la gente con los políticos?

Afecta bastante porque una democracia está basada en confrontaciones de ideas y, por lo tanto, en partidos políticos que defienden una visión general de cómo debe avanzar la sociedad, la economía. Es una visión con coherencia, con historia, con militancia. El problema de Macron es que es un movimiento construido alrededor de él, para él y por él, con una ideología que él asume. Tiene un poco de ideas de izquierda y otro poco, de derecha.

Macron y Erdogan renuncian a diferencias para presionar a Putin

Cuando le preguntaron por su programa económico, él dijo que no le importaba saber si era de izquierda o de derecha. Está en una lógica totalmente centrista, pero además poniendo aparatos políticos de los otros partidos. Como consecuencia evidente de eso es la subida de la extrema derecha.

También la extrema derecha quiere mostrarse moderada y centrista.

No es lo mismo, cuando uno defiende la preferencia nacional no puede decir que es centrista. Cuando uno defiende medidas que imponen reformas de la Constitución y que, al mismo tiempo, su programa tiene medidas que son ilegales, anticonstitucionales y contrarias a los tratados de la Unión Europea, no se puede decir que es centrista.

A través de su lenguaje y sus expresiones intentan hacerse pasar por centristas, pero en los hechos y en el programa electoral no dejan de ser de extrema derecha. Macron puso en evidencia el hecho de que no deja de ser un partido de extrema derecha ya que tiene una historia larga, desde la Tercera República, siempre con la misma coherencia y, en eso, no ha evolucionado.

AVS PAR