El senador provincial, Omar Plaini, aseveró que en 40 años de democracia "los argentinos tenemos una deuda pendiente que es resolver el tema de la macroeconomía". La verdad de los discursos de Cristina Kirchner y el riesgo de no resolver las internas, en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9).
De cara al 24 de marzo, ¿qué lectura hace del discurso de este martes de Cristina Kirchner?
En 40 años de democracia, los argentinos tenemos una deuda pendiente que es resolver el tema de la macroeconomía.
Nuevamente, la Vicepresidenta hizo foco en cuestiones que son fundamentales. Soy un convencido de que en estos 40 años, el gobierno de Néstor Kirchner y, posteriormente, el de ella, dejaron un país mucho mejor que el que recibieron y que el que tenemos hoy, porque era uno desendeudado en lo público y privado, porque había reservas en el Banco Central, el salario de las personas era el más alto de la Latinoamérica y la inflación no llegaba al 25%.
Lo anterior no se puede negar, es así. ¿Argentina puede estar en el concierto de las grandes naciones del mundo? No. Hay que hacer mucho más y, lamentablemente retrocedimos. Eso es un tema que tiene la democracia por delante.
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Hay dos temas por abordar. O nos quedamos en lo que decía el filósofo Zygmunt Bauman de esa sociedad líquida que hablaba él, en la que reina la incertidumbre y es vertiginosa por la rapidez de los cambios humanos que se producen, pero todo es fluido y volátil.
O, por otro lado, el otro filósofo actual que todos amerita que lo leamos, que es Byung-Chul Han, quien habla de que necesitamos más tiempo para emplear en áreas que no tengan que ver solamente con el trabajo, y también habla de una revolución del uso del tiempo.
Todo esto es lo que está en discusión en la sociedad mundial y un capitalismo altamente concentrando, donde se hace muy difícil lograr la equidad social que todos buscamos. En definitiva, el ser humano viene al mundo a ser feliz, pero la misma no se está encontrando porque hay un casi un 25% de la población mundial que ni siquiera para descarte es utilizada, por lo que cuando uno lo traslada a la región o a nuestro país, creo que hay una discusión que abordar.
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En su anterior conferencia, en Río Negro, Cristina tocó dos temas centrales. Uno es el bimonetarismo, el cual lo viene proponiendo desde el 2014 y aún nadie recogió el guante. Y lo otro se relaciona con el FMI. John Adams decía que hay dos formas de conquistar y esclavizar a una Nación: una es con la espada y la otra es con la deuda.
Evidentemente, nosotros hoy tenemos que cogobernar con el Fondo Monetario Internacional, con lo cual debemos cumplir las pautas y los acuerdos. Si los cumplimos y no los renegociamos, será difícil salir de la situación en la que estamos para cualquier gobierno.
Guillermo Moreno planteaba, desde una perspectiva económica, ciclos económicos que no coincidían con los periodos presidenciales. Hablaba de la convertibilidad, otro ciclo de 2002 a 2013 (Lavagna, Duhalde, Néstor y Cristina), y luego otro de decadencia que arranca lo de Kicillof, sigue con los segundos cuatro años de Cristina, los de Macri y los tres de Alberto, los cuales manifiesta que se comportan de la misma manera (inflación creciente, reservas cada vez menores, pérdidas del salario real y que esto se va acrecentando y cada uno entrega el gobierno en peor estado). ¿Le paree plausible ese análisis que incluye que parte del fracaso económico le cabe a Cristina?
No incluyo a Cristina porque en 2015 la situación era distinta a la que vivimos hoy. No resolvimos todos los problemas, pero íbamos en esa dirección generando empleo privado y público, una inflación que estaba por debajo del 25%, buenos salarios, entre otras cosas.
Hay que tener en cuenta que se venía de atravesar un difícil momento con lo de Lehman Brothers, es decir, siempre el contexto y las tendencias son internacionales, no son locales porque el mundo es el que va determinando y nosotros estamos dentro de ese.
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Es por eso es que la concentración brutal de este capitalismo hoy hace que después eso se desparrame por todos los continentes y tengamos las consecuencias que tenemos.
Lo que debemos hacer, como dijo la Vicepresidenta, es ir hacia una hegemonía democrática de una sola fuerza o vamos a un acuerdo de los grandes partidos. Los programas económicos no son una cuestión de fe u objetivos que persiguen personas, sino que son eficaces para alcanzar esos objetivos a partir de los gobiernos.
Entre lo que plantea Moreno y la realidad hay que saber separar una cosa de la otra. Lo mejor que nos pasó fue entre 2003 y 2015. ¿Alcanzamos el objetivo deseado que es lo que nosotros denominamos justicia social? No. Pero íbamos camino a eso. Llevamos 40 años y en algunos periodos solamente se logró estabilizar la macroeconomía.
Estos tres años y medio de Alberto Fernández, siendo Cristina Kirchner su vice, ¿no le caben a ella porque es correcto que hoy estamos peor que en 2015, pero al mismo tiempo alguien podría decir que estamos peor que en 2019?
La diferencia y el conflicto que tenemos dentro del Frente de Todos es precisamente que la Vicepresidenta marca una diferencia y lo hizo en diciembre de 2020 en el Único de La Plata. Allí hizo una carta pública en la que dijo que si no alineamos precios, salarios, jubilaciones y tarifas corríamos en un proceso que se iba a degradar porque a los seis meses perdimos las elecciones de medio término y las diferencias se agudizaron.
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Hasta donde Cristina tiene la mayor responsabilidad, el objetivo lo cumplió, que fue en 2019, conformando una coalición que permitiera recuperar el gobierno. De allí en más, vino la pandemia, en la cual coincidieron bastante ella y Alberto. A partir de diciembre del 2020, en cada intervención pública que ella tuvo fue marcando cosas y ahora nos lleva a la situación actual.
Las diferencias entre ambos están bien marcadas porque evidentemente no pudimos resolver las cuestiones básicas que debemos solucionar, sobre todo, cuando uno viene del campo nacional y popular a lo que tiene que dar respuesta es a los sectores de la fuerza del trabajo y a los que menos tienen.
¿Ella terminará siendo candidata?
Creo que de no resolverse el tema de la causa, será muy difícil, no la veo siéndolo condenada y proscripta. Casación y la Corte seguramente acelerarán, en un enfrentamiento que nadie puede obviar, por una persecución que viene sufriendo.
Si todo se soluciona, sí puede serlo porque tiene todo el potencial y es la que acumula más voto popular y representación en la fuerza. En fábricas, talleres y barriadas piden por Cristina presidenta.
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¿Se imagina unas PASO donde haya candidatos que representen distinto sectores del FdT y que esa sea una forma de resolver la discordia actual?
Siendo gobierno tenemos que aplicar algo del Papa Francisco y es que 'la unidad prevalece siempre al conflicto', pero después la política tiene una dinámica impensada. Ojalá que podamos encontrar una síntesis. Mientras Alberto tarde más en definir su situación, complica todo.
Porque en el caso de la oposición, si bien son muchos los que aspiran en las PASO, con algún esquema lo resolverán. Si nosotros no manejamos bien el tiempo y el espacio vamos a tener dificultades.
El dirigente siempre tiene que ver un poco más adelante, estar un paso o dos adelantado a la base, a lo que representa, si no el riesgo es enorme y lo tenemos claro por lo que uno escucha de la oposición, que menciona que la idea es volver a lo que ya se hizo, pero de forma más acelerada y cruel.
Espero que prime la cordura y la unidad que tiene que tener contenido, porque lo contrario no sirve. Necesitamos un programa. Hago autocrítica y también el movimiento sindical debería elaborar uno. Teniendo un programa se puede sacar al país adelante y pensar a futuro.
BL JL
