"Piñas van, piñas vienen, los muchachos se entretienen", dice la canción del grupo punk argentino 2 Minutos. Y así terminó una semana intensa, la última antes del plebiscito del domingo para definir si los chilenos aprueban o rechazan la nueva Constitución.
En el Congreso, mientras se realizaba una sesión especial para debatir la presencia de carteles internacionales del narcotráfico en Chile, el diputado de extrema derecha Gonzalo de la Carrera le dio un puñetazo en el ojo derecho a su par Alexis Sepúlveda, del Partido Radical, de centroizquierda, vicepresidente de la Cámara.
De la sesión participaba la ministra del Interior, Izkia Siches, a la cual De la Carrera le auguró el final en su cargo después del domingo. Siches recogió el guante y le hizo notar que era una falta de respeto.
El vicepresidente Sepúlveda condenó el agravio de De la Carrera y, acto seguido, trató de estúpida a la diputada independiente de izquierda Marcela Riquelme. Cuando Sepúlveda le recriminó violencia a De la Carrera, recibió un puñetazo en el ojo, otro en la cara y una patada.
En la trifulca, el funcionario dijo que había reaccionado ante una agresión de Sepúlveda, pero las cámaras de seguridad, como si fueran el VAR en el fútbol, demostraron que había sido al revés. Su partido anunció la expulsión de De la Carrera de su bancada. También lo sancionó la comisión de Ética de la Cámara.
Le harán control de drogas a los diputados chilenos
A tres días del referéndum sobre una nueva Constitución en Chile, con un ambiente caldeado, las encuestas apuntan a un fracaso de la propuesta para reemplazar la heredada de la dictadura de Pinochet. La nueva Constitución fija mayores derechos sociales y busca modificar el actual Estado reducido, que da prioridad a la inversión privada, por un Estado de bienestar con una batería más amplia de derechos fundamentales.
Las encuestas dan al Rechazo una ventaja de cuatro a 12 puntos sobre el Apruebo, las alternativas que deberán ser votadas en forma obligatoria el próximo domingo. También exhiben un alto porcentaje de indecisos, del orden del 10 al 15%.
Para este referéndum están convocados 9,2 millones de chilenos. La nueva Constitución, de 178 páginas, 388 artículos y 57 normas transitorias, incluye la plurinacionalidad con el reconocimiento de diversas naciones y pueblos indígenas, así como la creación de un Consejo de la Judicatura en lugar del Poder Judicial con un sistema interno especial y el derecho al aborto.
De ser rechazada, continuará en vigor la actual Constitución. El presidente de Chile, Gabriel Boric, prevé convocar en ese caso una nueva asamblea constituyente en virtud del 78% que aprobó el plebiscito para constituirla después de las protestas masivas de 2019. El referéndum es visto como una evaluación de los seis primeros meses de gobierno de Boric.
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