Los gobiernos europeos se han puesto de acuerdo esta mañana en imponer un embargo total al petróleo ruso como parte de las sanciones por la guerra en Ucrania. Lo anunció la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
El plan contempla un período transitorio hasta finales de año para contener el golpe en los mercados y preparar vías alternativas de suministro.
La propuesta de sanciones debe ser aprobada por unanimidad por los 27 Estados miembros. Incluye correctivos para personas y entidades responsables o involucradas en las masacres de Bucha o Mariúpol, así como la expulsión del sistema de transferencias internacionales SWIFT al banco más grande de Rusia, Sberbank.
Hungría y Eslovaquia, que son totalmente dependientes del petróleo ruso y no tienen salida al mar, podrían disponer de más tiempo. El anterior paquete de sanciones, el quinto, contemplaba recortes energéticos. En concreto, con el carbón. Sigue quedando fuera un recurso crucial: el gas.
CB PAR