Después del pedido de la vicepresidenta de la Nación sobre la posibilidad de pensar en incrementos fijos, los sindicatos rechazaron de plano esa medida. Insisten con que las paritarias tienen que ser abiertas.
Por eso, a pesar del intento realizado por el ministro de Economía Sergio Massa, quien la semana pasada se reunió con Daer y Acuña, los sindicatos, en su mayoría cercanos al presidente Alberto Fernández, al igual que las organizaciones, mañana salen a la calle.
La CGT asegura que la manifestación es un mensaje al empresariado argentino, al que considera, responsable de la inflación por ser “formadores de precios”. El Gobierno entiende que cualquier movilización en la calle genera ruido en un momento poco propicio. Recordemos que el ministro de Economía, Sergio Massa pidió 100 días de paz para poder trabajar. Y eso vale para dentro de de la Casa Rosada, como para fuera.
MR PAR