Si la muchacha del retrato es bella y tiene el cuello largo, entonces pertenece a Amedeo Modigliani. Se trata de una marca de estilo poco estricta pero bastante efectiva.
Este episodio sucede en la ciudad de Piacenza, donde un abogado compra en un remate el retrato anónimo de una joven y luego descubre que se trata de un Modigliani.
Dudas con un cuadro adjudicado a Caravaggio
"Enseguida pensé que el cuello largo de la muchacha podía ser un elemento decisivo para atribuir ese cuadro a Modigliani”, dice el abogado. Elemento decisivo, sin duda. Un grupo de expertos acaba de confirmar que se trata de un Modigliani pintado en París en torno a 1906.
JL PAR