El anuncio del Gobierno de Corrientes sobre el aumento del 12% en los salarios docentes, que llevaría el sueldo mínimo a más de $957.000, generó un fuerte debate en el sector.
A pesar de los números oficiales, profesores consultados por Perfil NEA denunciaron que la cifra anunciada contiene "ítems remunerativos no bonificables" y en "negro" que perjudican a los trabajadores de la educación, especialmente a los que están próximos a jubilarse.
Corrientes: Gustavo Valdés anunció el cronograma de pago de sueldos de agosto con un aumento del 12%
Según el comunicado oficial, un maestro de grado con un cargo percibe más de $957 mil a partir de agosto, y con dos cargos, el mínimo neto asciende a más de $1.707.000. Sin embargo, un sector docente desmintió las cifras y afirmó que "una maestra de grado sin antigüedad quedó en $701.073 sin pluses y con pluses $911.073".
El salario docente, entre lo oficial y la realidad de los trabajadores
El docente Saúl Martínez remarcó que el problema no es el monto, sino la composición del salario. “El tema es que tenemos ítems remunerativos no bonificables y en negro”, aseguró.
“Inflan el neto con montos en negro y no aporta a la antigüedad, ni a la zona, ni a la carrera docente y nivelan para abajo, por lo que no llega a los jubilados”, denunció.
Martínez también señaló la falta de equidad en la escala salarial: “El que recién se inicia gana prácticamente igual que uno con 30 años de antigüedad”.
Según sus estimaciones, “más de un 60% del sueldo docente está en negro, solo un 40% entra en la carrera, es una bestialidad lo que hacen. Mienten con los montos porque cuando te jubilás te querés matar”, sentenció.

La política salarial docente genera polémica y denuncias en la provincia
El anuncio del Gobierno de Corrientes sobre el aumento del salario docente, que busca mostrar una mejora significativa en el poder adquisitivo, se ve empañado por las denuncias de los propios trabajadores.
La existencia de una gran parte del sueldo en "negro" y sin impacto en la jubilación, según los docentes, genera una situación de incertidumbre y preocupación en el sector.
La polémica entre los números oficiales y las denuncias de los maestros pone en el centro del debate la transparencia de la política salarial del gobierno provincial y el futuro de los trabajadores que se desempeñan en el ámbito de la educación.