Piera Alaugnier, psicoanalista italiana fallecida hace 30 años nos planteaba la obligación de "tener que pensar, tener que dudar de lo pensado y tener que verificarlo" en la acción, que sería parte de su legado.
Sin embargo, en la última edición de Le Monde Diplomatique surgen algunas dudas sobre qué se hizo a nivel global ante lo que Andrés Malamud llama una laguna de cisnes negros, que fueron apareciendo luego que en el famoso libro de Taleb, titulado justamente El cisne negro,en 2010, el autor asegurara: "Yo veo el riesgo de un virus agudo y muy extraño desparramándose por el planeta". Y en 2015 la muy prestigiosa revista Nature Medicine profetizaba: "Un racimo de coronavirus de murciélago tipo SARS, exhibe potencial de emergencia en humanos."
Pero más allá del famoso video de Bill Gates con similares advertencias, el Consejo Nacional de Inteligencia de EE.UU., ya en 2004 auguraba: "Algunos expertos creen que es sólo cuestión de tiempo hasta que una nueva pandemia aparezca, tal como la gripe española que mató entre 1917 y 1919 veinte millones de personas en el mundo". Inclusive destacando su probable inicio en megaurbes existentes en China, India o el Africa subsahariana.
Es decir que ya no se trataba del hallazgo de un cisne negro entre una bandada inmensa de cisnes blancos, sino que varios cisnes negros se avistaban en el horizonte bien visible del siglo XXI.
Sin embargo en el año 2000 y en Argentina el Dr, Claudio Biquard creaba un Centro en Medicina Preventiva, al cual todavía pertenezco como profesional médico, con la muy conocida consigna de la prevención para evitar la multiplicación de enfermos y de enfermedades a los que hubiera que curar.
Cuando la salud comenzó a verse como gasto y no como inversión se bajó drásticamente el número de camas disponibles en EE.UU., Francia, Italia y España
¿Pero qué se hizo a nivel global? Desde los 80 cuando la salud comenzó a verse como gasto y no como inversión se bajó drásticamente el número de camas disponibles en EE.UU., Francia, Italia y España, reduciéndose los presupuestos sanitarios a nivel global.
Es conocido el retroceso en el propio EE.UU. de los Centros de Investigación de Pandemias, Epidemiología, Virus y de las tímidas reformas de su sistema de Salud logradas en los períodos del Presidente Obama.
Mientras que en la Argentina y más precisamente en CABA las imprescindibles enfermeras no son consideradas, increíblemente, a nivel presupuestario, personal sanitario, aquí y ahora, según se testimonia en la revista de La Nación.
Coronavirus y los espejismos sobre un mundo mejor
¿Cuál es la respuesta entonces frente a este ARN-Zombie, porque toma vida, cuando alcanza a un ser vivo y comienza a replicarse?, que es el Coronavirus.
Quizás comience a develarla, la presencia de cabras en Gales, ballenas en Cancún, un oso asomando en Monterrey, un puma en el coqueto barrio de Providencia en Sgo. de Chile, lobos marinos en las calles del puerto de Mar del Plata, tapires en Haifa, Israel...Porque somos responsables del maltrato animal, y somos frágiles, mortales, vulnerables nos recuerda la filósofa francesa Corine Pelluchon en Ñ; somos responsables del crecimiento desmesurado demográfico, del uso indiscriminado de combustibles fósiles que provocan la crisis climática y el calentamiento global, somos responsables de la contaminación atmosférica, y del agua, elemento esencial para la vida, del desmonte de selvas y bosques, que continúa en Argentina, de generar crisis sanitarias y migraciones sin destino.
Las pandemias y epidemias que aterrorizaron a la humanidad en los últimos 100 años
Y debemos reparar, como diría Arturo Frondizi ¿que és prioritario? ¿lo que se gasta en armas o lo que se paga en salud?, en insumos sanitarios y en honorarios de los profesionales, sin distinción de categorías, dado que no podemos resolver el problema de este ser minúsculo, ni con rifles ni con bazookas.
En su magistral novela Albert Camus dice: "La Peste no es tanto como ataca los cuerpos sino como desnuda las almas". Esas múltiples almas de esta Humanidad que está jugando su Destino, en esta encrucijada de nuestro espacio-tiempo, son las que necesitan reparar, lo reparable de nuestra relación con nosotros mismos, entre nosotros mismos y con la Naturaleza Toda.
