El Acuerdo Mercosur-Unión Europea, que se ha anunciado hoy, es un gran logro para la Argentina productiva. Es la apertura a la integración y una posibilidad cierta para el ingreso de divisas que ayudarán a que el país crezca. Su consecuencia puede significar más trabajo, generación de empleo, y mayor producción, todas cuestiones por las que venimos trabajando desde la gestión gremial.
El crecimiento y el desarrollo que podría significar mayor apertura de mercados nos permitirá como país con fuerte potencial exportador, dar vuelta y pasar de un círculo vicioso a un circulo virtuoso.
Acuerdo Mercosur-Unión Europea: las mejoras económicas que vaticinan los socios de Argentina
Sin embargo, como en todo acuerdo, habrá que ver la letra chica. Saber cómo ha quedado cada sector en relación al acceso a mercados, tanto para sectores en riesgo por la competencia de productos importados desde la U.E. como para sectores con oportunidades por la mayor competitividad en las futuras exportaciones hacia el continente europeo.
Nos preocupan algunas economías regionales, ya que no sabemos cómo se han negociado. No podemos olvidar que hay un mercado común europeo con fuerte desarrollo en innovación y tecnología, que podría entorpecer nuestro crecimiento.
El acuerdo es positivo y alentador, y va en línea con lo que venimos trabajando como entidad con Argentina Exporta, con el Ministerio de la Producción en grupos integrados que apuestan a la cadena de valor.
El acuerdo que cambia la historia del Mercosur
Coninagro representa a muchas economías. Y hay que analizar cómo impacta en cada una de ellas. Hay algunas dudas en olivicultura y vitivinicultura. También necesitamos saber cómo se distribuirán las cuotas intra-Mercosur. Cuestiones sobre las que deberemos trabajar con el gobierno para canalizar necesidades y posicionamiento para lograr entre todos una Argentina pujante y exportadora.
* Presidente de CONINAGRO.