La justicia allanó este miércoles por partida doble la casa del abogado Marcelo D’Alessio. Por un lado, por una causa por extorsión al empresario agropecuario Pedro Etchebest, de la cual está a cargo la justicia de Dolores, con el Juez Alejo Ramos Padilla, señalado por Elisa Carrió como alguien que “responde a la cámpora”. Por otro lado, el magistrado de Lomas de Zamora, Federico Villena, por una causa del 2016 que investiga presunto lavado de dinero.
Según pudo consignar Página 12 en una nota firmada por Irina Hauser y Raúl Kollmann ambos jueces quedaron asombrados por los resultados de los allanamientos a su mansión en el barrio privado Saint Thomas, en Esteban Echeverría, a raíz de la enorme fortuna oculta del abogado D’Alessio. El motivo de tal sorpresa, aseguran, es que se desconoce cuáles son las fuentes de ingreso del acusado.
La casa del country no sería la única, ya que tendría también un departamento un Puerto Madero y una propiedad en el Chaco.
Mientras que Padilla busca determinar si el dinero viene de las extorsiones a empresarios involucrados en el casos de corrupción - extorsiones que D’Alessio aseguró haber hecho por pedido del fiscal federal Carlos Stornelli, pero que este último niega -, su par de Lomas de Zamora busca determinar si proviene del lavado de dinero del narcotráfico.
La fortuna que amasa D’Alessio, informó el mismo medio, incluyen una Range Rover nueva, con un valor superior a los 100.000 dólares, y dos modelos viejos del mismo automóvil.
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También aseguran que en la nómina de autos del abogado también figuraban “una camioneta RAM 2500, Scania, un BMW X6, dos camionetas Hilux, un Peugeot 308 y dos Chevy de colección”. Así como dos motos de alta cilindrada, una de ellas sin papeles, y un yate amarrado en San Fernando a nombre del padre.
También encontraron “una colección de 50 relojes de alto valor, incluyendo un Double Tourbillon que, de ser original, vale alrededor de 200.000 dólares”.
DyR/CP
