Pasada la medianoche, efectivos de Policía Federal culminó el peritaje en la cuadra donde vivía Ángeles Rawson junto a su familia, en busca de nuevas pruebas que permitan elaborar otras hipótesis, luego de que peritos forenses aseguraran que la joven no fue violada. Los oficiales allanaron el domicilio familiar, mientras la joven era velada en la localidad de Vicente López.
Según confirmaron fuentes cercanas a la investigación a Telenoche, la joven habría llegado a su casa poco antes de desaparecer el lunes. Las nuevas líneas de investigación se inclinarían, entonces, por una venganza financiera o personal hacia su familia.
El allanamiento. Pasada la medianoche, finalizado el allanamiento, Opatowsky ofuscado declaró a los medios: "Es como una gran invasión en tu propiedad y pareciera como que sos vos el asesino de tu propia hija", dijo.
El padastro de Ángeles confió a la prensa que durante el allanamiento, la Policía llevó "la computadora, la notebook, los libros del colegio de la nena, agendas y una notebook de mi mujer". Ante las variadas hipótesis, la policía revisó los equipos de pesca del padastro y, principalmente, las tanzas, pero no se llevó nada porque el padre lo impidió ya que "lo necesito para trabajar".
Sobre el secuestro de una sábana, Sergio Opatowsky aclaró que era del hijo, a quien "lo operaron de una fístula y por ahí quedó una manchita de sangre".
Descartó que el operativo fuese sorpresivo, pero reconoció ciertos desencuentros: "En un principio había ido al velatorio, luego me informaron del allanamiento. Esperé una hora y media en mi casa y regresé al velatorio, pero poco después llegó la brigada a casa y debí presentarme".
Pese a las versiones, cada vez más fuertes, sobre que la adolescente regresó a la casa, Opatowsky rechazó tal posibilidad: "Desayuné con ella y luego me fui a hacer una cobranzas, pero no volvió a casa", respondió tajante ante la consulta de una cronista.
Sin relación. Horas atrás, la familia de Ángeles negó que el crimen fuera una venganza contra su padre, por una supuesta vinculación con el reciclado de residuos.
"No tenemos nada que ver con la CEAMSE", dijo Sergio Opatowsky, padrastro de la adolescente. El hombre insistió en relatar los detalles de la búsqueda de su hijastra. "Yo la vi cuando estaba desayunado, después a las dos de la tarde volví de hacer las cobranzas pensando que ella ya estaba en el colegio", relató.
"No entré a la habitación, pero si hubiese entrado tampoco me hubiera dado cuenta porque, aunque dejó la mochila, hubiera pensado que había decidido dejarla. Me cae la ficha cuando me dicen que no llegaba", explicó. "Incluso yo le digo (a la madre) que no se asustara, que sólo habían pasado unos minutos", relató el hombre.
"Cuando me di cuenta de que esta nena no iba a volver a casa, le avisé al padre que hiciera la denuncia y yo me fui a los hospitales. Fui al colegio e hice el trayecto que supuestamente ella debía haber hecho, pasando las dos cuadras de la CEAMSE", prosiguió Opatowsky. "Ahí localizo a dos camiones y dos coches abandonados. ¿Podía haber sido el lugar (del crimen)? No lo sé", se preguntó.
