POLICIA
En una tanguera de Boedo

Cayó "viudo negro" que robó a 100 mujeres

Las seducía y luego dormía con un somnífero colocado en bombones. El hombre, de 70 años, fue atrapado cuando estaba por sumar a otra mujer a su lista de víctimas. Operaba en bingos y boliches.

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Un hombre de 70 años, acusado de haber robado a más de 100 mujeres, a quienes seducía y luego dormía con un potente somnífero colocado en bombones, fue detenido en una tanguería del barrio de Boedo, informaron fuentes policiales.

El individuo fue localizado anoche a las 20.30 por agentes de la División Búsqueda de Personas de la Policía Federal, cuando, elegantemente vestido, se disponía a robar a una mujer de buena posición económica, a quien ya le había convidado un bombón con narcotizante, en una tanguería de las calles San Juan y Boedo.

El hombre, conocido como el "viudo negro", cumplía en su domicilio una condena por estafas reiteradas a mujeres y había escapado.

En el año 1995 había cumplido una condena de 8 años de prisión. En 1998 salió en libertad y volvió a ser detenido por el mismo delito. Esta vez, el "viudo negro" fue condenado a 24 años de prisión, pero al poco tiempo se fugó violando el arresto domiciliario

El hombre llegó a engañar a más de 100 mujeres viudas, solteras y casadas, a quienes conocía frecuentando casinos, hoteles de lujo, tanguerías, confiterías céntricas y locales bailables para gente sin pareja.

Según fuentes policiales, el hombre había comenzado de joven a seducir mujeres y a robarles dinero, joyas y otros objetos de valor mediante el uso de soporíferos en la década del 60.

En varias oportunidades cayó preso, pero fue liberado por la Justicia, porque muchas de sus víctimas no se presentaron a testificar por sentirse avergonzadas. 

Durante la investigación del caso los policías lograron determinar que el "viudo negro" con indumentarias elegantes y perfumes importados se dedicaba a captar mujeres solas, con las cuales mantenía largas charlas. Con gran capacidad para escuchar a sus víctimas, lentamente las seducía hasta que las esquilmaba.

El plan del hombre era simple: a la vista de la mujer compraba bombones en un quiosco, los guardaba para pagar y del otro bolsillo extraía otro bombón "inyectado" para convidar a la incauta mujer.

A los pocos minutos la mujer adolecía de un profundo cansancio y letargo, oportunidad en la que el hombre se ofrecía para acompañarla en taxi a su domicilio.

Una vez en la casa de la víctima el delincuente terminaba de "dormirla" ofreciéndole un té cargado con narcótico. Así, el hombre tenía todo el tiempo para saquear la casa mientras la mujer yacía dormida en la cama.  El acusado pudo ser finalmente atrapado mediante datos aportados por varias de sus víctimas.

El hombre quedó alojado en la alcaidía de la Superintendencia de Investigaciones de Villa Lugano, en General Paz y Madariaga y esta mañana fue llevado ante el Juzgado de Ejecución Penal Uno, a cargo del juez Sergio Delgado, para prestar declaración indagatoria.

Fuente: Télam y DyN