Una de las querellas de familiares de víctimas de tragedia de Once apeló hoy la falta de mérito que el juez federal Claudio Bonadío le dictó a Mario Francisco Cirigliano, dueño del Grupo Plaza, quien -a diferencia de su hermano Claudio Cirigliano (Cometrans y TBA)- no fue elevado a juicio oral por la tragedia, que comenzará a fin de año.
El abogado Gregorio Dalbón apeló la decisión y sostuvo en el escrito que la Cámara Federal había procesado a Cirigliano por los delitos de "estrago culposo" y "administración fraudulenta" de los subsidios del Estado por lo que "debe, inexorablemente, ser asimismo dispuesta la elevación de la causa a juicio con relación a su persona tal como oportunamente se decretó con relación a los restantes encartados".
El letrado siguió: "Toda vez que constituye una flagrante incongruencia procesal y una inaceptable violación de las garantías constitucionales consagradas", según indicó el pedido al que accedió Perfil.com.
Dalbón le volvió a pedir a Bonadío que resuelve su pedido para citar a indagatoria en la causa al ministro de Planificación Federal, Julio De Vido. Bonadío envío a juicio a mediados de febrero a 28 acusados, entre ellos 22 directivos de TBA, los ex secretarios de Transporte Juan Pablo Schiavi y Ricardo Jaime y el maquinista de la formación siniestrada, Marcos Córdoba.
Según pudo saber este portal, el juez federal basó su decisión en un informe de la AFIP que presentaron los abogados de Mario. En ese escrito, aseguran que Mario y Claudio Cirigliano dividieron el holding del transporte tres años: Mario quedó a cargo de la rama automor (Grupo Plaza, TATSA) y Claudio de la ferroviaria (Cometrans, TBA, EMFER).
Mario, de todos modos, figuraba como apoderado de Cometrans y fue durante años director de Grupo Plaza Internacional y Perusar Division Internacional -ambas radicadas en Madrid- que son las accionistas principales de firmas inversoras que controlaban Cometrans y TBA, según reveló este portal en el especial "El Imperio de Los Cirigliano".
A su vez, la Cámara Federal había confirmó el procesamiento de Cirigliano y, al referirse a los responsables de Cometrans y TBA, "han interactuado siguiendo un mismo designio criminal".
La ira del fiscal. La medida de Bonadío fue apelada antes por el fiscal del caso, Federico Delgado. En un escrito, la Fiscalía afirmó que el juez federal "se manejó un juicio en base a fines particulares y no a la ley y se aplicó un Código Procesal de reglas extrañas ¿privadas?, ¿propias?, pero no contempladas en la ley".
Delgado precisó que "la falta de mérito se dictó a escondidas, aparentemente el 14 de febrero, y se le notificó recién el 28 de febrero". Esto es, seis días después del acto aniversario de la tragedia. Para el fiscal, Mario Cirigliano "encarnó la voluntad social de una firma que, a través de uno de sus tentáculos, TBA, administró fraudulentamente dinero público".