Un conocido contador del partido bonaerense de San Martín fue asesinado por delincuentes cuando salió a la puerta de su casa en la localidad de Villa Ballester a recibir a su esposa, que había realizado trámites en un banco de la zona. Los investigadores del caso "no descartan ninguna hipótesis" en torno al crimen del contador Gabriel Miani, de 50 años, quien fue baleado sin mediar palabra por los atacantes, que se movilizaban en dos vehículos con los que luego fugaron, informaron fuentes policiales.
El hecho ocurrió a las 13.30, cuando la esposa de Miani, identificada como Carmen Leuzzi, una arquitecta de 48 años, regresaba a su domicilio de la calle Falucho 677, entre República y Libertad, tras concurrir a una sucursal del banco HSBC situada en pleno centro de San Martín. Según indicaron a DyN fuentes del caso, la mujer había ido a verificar la habilitación de una caja de seguridad en el banco pero no había retirado dinero.
Cuando llegaba al domicilio familiar, a bordo de un Toyota Corolla, fue sorprendida por seis personas que se movilizaban en un Peugeot 206 y un Ford Ka -tres en cada rodado- y le cerraron el paso, tras lo cual descendieron de uno de los vehículos.
Según fuentes policiales, en el preciso momento en que Miani salió de la casa, y "sin mediar palabra", abrieron fuego contra el hombre.
Miani recibió, según los testigos, entre seis y ocho balazos, y falleció cuando lo llevaban al Hospital General Belgrano de San Martín. Luego de que balearan a su esposo, la mujer intentó escapar, por lo que los delincuentes también efectuaron cinco disparos al auto, aunque la esposa de Miani resultó ilesa.
Los sujetos fugaron en los dos automóviles sin robar ningún bien o pertenencia y eran intensamente buscados por personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Martín. "En principio, la hipótesis de una salidera bancaria no la manejamos porque nunca solicitaron dinero ni la entrega del auto. Aparte, la mujer no había hecho ninguna operación comercial", dijo a DyN una alta fuente policial.
Los investigadores comenzaron a recabar datos entre las personas que se encontraban en la zona para tratar de esclarecer el episodio y atrapar a los homicidas. La esposa del contador sufrió una fuerte crisis nerviosa y recién mañana declararía ante el fiscal de San Martín Rubén Moreno, a cargo de la investigación. Miani, un conocido profesional de la zona de San Martín, era dueño de un estudio contable especializado en el asesoramiento del negocio empresario del autotransporte terrestre de carga y logística.
Según las fuentes, el matrimonio -con un buen concepto entre los vecinos- tiene tres hijos, ninguno de los cuales estaba en la casa al momento del crimen. En la puerta de la vivienda se secuestraron diez cápsulas de armas calibre 9 milímetros y .380, cinco de las cuales impactaron en la puerta.
Si bien en principio se evaluó la hipótesis de una salidera bancaria a partir de un dato erróneo de los delincuentes en torno a que la mujer había retirado dinero de la sucursal bancaria, voceros del caso consideraron poco probable, aunque no del todo descartada esa línea investigativa. Por esa razón se pidieron informes al banco y la cinta de la cámara de seguridad interna para ver si hubo algún movimiento extraño dentro de la entidad. Y se dispuso un relevamiento en los alrededores del establecimiento para ver si hubo testigos que hayan visto autos de similares características a las de los que usaban los delincuentes, uno de ellos de color rojo.