Un oficial de la Policía de Neuquén fue detenido después de haber matado a uno de los dos delincuentes que entró a robar a su casa del barrio Canal V, en las afueras de la capital provincial.
La versión de Marcos Merino, un joven oficial de 23 años, es que se defendió en medio de un intento de robo. Sin embargo, la fiscal María Eugenia Titante planteó algunas sus dudas respecto a la mecánica del ataque y resolvió demorarlo preventivamente. Lo que sí está claro es que el hombre de 37 años que murió era un delincuente con varios antecedentes delictivos.
Merino, que hacía poco menos de un año que formaba parte de la fuerza, aseguró que dos sujetos entraron a su casa de la calle Villanueva casi esquina Crucero General Belgrano con intenciones de robo. Eran cerca de las 3 de la tarde del lunes.
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Por estas horas, el principal interrogante pasa por resolver si el efectivo disparó desde el interior de su domicilio o si gatilló en la calle, cuando los perseguía como ocurrió en el caso del jubilado de Quilmes. Es decir, si se trató de un homicidio agravado o de un caso de legítima defensa. Algunos testigos aseguran haber visto al policía corriendo a los tiros a los delincuentes.
De acuerdo a las fuentes, el ladrón muerto estaba tirado en la calle cuando una ambulancia lo trasladó hasta el hospital Castro Rendón, donde finalmente falleció a raíz de las gravísimas heridas que había sufrido.
Los voceros identificaron a la víctima fatal como Gerardo Villa (37), conocido delincuente de la zona con varios antecedentes por robo y otros delitos.
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En 2008 fue arrestado en Bahía Blanca, acusado de formar parte de la banda de la ametralladora, que había cometido una serie de robos en la ciudad. Sin embargo, los testigos que participaron de la rueda no lo reconocieron y automáticamente quedó en libertad. Hace tres años estuvo preso por desvalijar varias casas, pero lo beneficiaron con arresto domiciliario.
Su cómplice en el robo se entregó esta mañana y esperan que pueda aportar información clave sobre lo que sucedió en la tarde del lunes.
Merino es oriundo de la ciudad de Andacollo, en el norte de la provincia y a unos 460 kilómetros de la ciudad de Neuquén, donde actualmente reside. Enterados de su detención, familiares y vecinos marcharon por el pueblo exigiendo su inmediata liberación.
El caso de Merino se suma a otros hechos similares registrados en las últimas semanas y que reactivaron la vieja polémica de la justicia por mano propia. Entre ellos, se destaca el caso del herrero jubilado Jorge Ríos (71), que persiguió y mató a uno de los ladrones que entró a robar en su casa Quilmes, y el del anciano marplatense Ubaldo Génova (81), que asesinó de un disparo a un delincuente cuando intentaba meterse en su domicilio por la ventana del baño.
LN
