Luego de que la autopsia practicada al nene de dos años asesinado en Neuquén confirmaron signos de abuso sexual y golpes, un grupo de vecinos incendió anoche la casa de su padrastro, que se encuentra detenido como el principal acusado del crimen.
Con el recuerdo fresco del asesinato de Lucio Dupuy, el chico de 5 años muerto a golpes en La Pampa a manos de su madre y su pareja, se conoció este lunes 6 de diciembre el caso de un pequeño de 2 años que fue llevado por su padrastro al Hospital Dr. Horacio Heller de la capital neuquina y que, al ser observado por los médicos, mostraba señales de violencia.
Al momento de acercarlo hasta el nosocomio, con múltiples golpes en el cuerpo, se constató que el nene ya estaba muerto, a pesar de las maniobras de reanimación del personal. Por el hecho, el padrastro quedó demorado como el principal sospechoso del crimen, bajo la orden del jefe de la Unidad Fiscal de Homicidios, Andrés Azar. En la autopsia practicada por el Cuerpo Médico Forense, los resultados arrojaron diversos traumatismos e incluso señales de abuso sexual.
El hecho despertó la indignación y el repudio de los vecinos del barrio 7 de mayo, que se presentaron en la puerta del domicilio del acusado. Con materiales inflamables y guiados por el dolor y la bronca, incendiaron la casa del principal acusado, reduciendo gran parte a cenizas.
La policía se hizo presente en el lugar pero no pudo detener la furia vecinal, luego de que el suceso tuviera trascendencia ante la magnitud del hecho. Incluso hubo reclamos contra la madre de la víctima. "De acá se van a ir, el barrio los va a sacar", le espetó una vecina a la mujer.
Qué dijeron los forenses del caso
La autopsia practicada al niño de dos años especificó que presentaba diversos traumatismos en su cuerpo y además tenía lesiones compatibles con un delito contra la integridad sexual, según destacó La Mañana de Neuquén.
Además, desde el mismo medio se confirmó que el acusado de 26 años quedaba al cuidado del nene asesinado y sus tres hermanos cuando su pareja y la madre la víctima se iba a trabajar.
Con el hecho consumado, los niños de 4, 5 años y un bebe de pocos meses, quedaron a cargo de su abuela, mientras la justicia decide como seguir con el caso.
GI/ff
