Apareció el famoso
video que impulsó el
escándalo político del mes, prueba sobre la que está basada la acusación que pesa sobre el
intendente de Pinamar, Roberto Porretti, en relación a un presunto pedido de coimas a boliches
nocturnos de la ciudad balnearia.
Y si bien la
defensa del político aseguró que
las imágenes fueron editadas con el fin de ensuciar la imagen del funcionario, la grabación
realizada por los empresarios de la noche muestra, según publicó el diario
Clarín, una reunión entre Porreti y los propietarios de clubes nocturnos en donde,
implícitamente, se mencionó un presunto soborno.
"Acá corre riesgo mi gobernabilidad. ¿Escuchaste? ¡Mi gobernabilidad...! Vos los
conocés a los vecinos de Pinamar, lo duros que son", asegura el matutino que se le escucha decir a
Porretti. De ese encuentro, según consta en el video, participaron también el secretario de
Gobierno, Aldo Leonián, Javier Porjolovsky y Rubén Cameroni, dueños del complejo
Ku-El Alma.
La cinta completa que podría terminar con la destitución de Porreti
dura 58 minutos y cuenta con un trabajo de edición y subtitulado. Como hay ciertas
partes del video en donde el audio no se llega a escuchar bien, los peritos se encuentran
analizando la prueba.
Secuencia. Todo comienza cuanto Porjolovsky ordena tres fajos de billetes de 100
pesos para luego mantener una charla con Leonián de aproximadamente media hora. Al funcionario se
lo ve sólo una vez, en una imagen fija. En la conversación se escucha la frase
"Plata A", para hablar de una deuda del boliche de 225 mil pesos, y
“Plata B”, clave para referirse a la posible coima.
Luego de una discusión en donde hay explicaciones y falta de acuerdo sobre los montos a
transferir al intendente, en el minuto 40 aparece Porretti. “Roberto, es que vamos a hablar a
calzón quitado. Aldo dice que vos estás enterado de todo”, le manifiesta uno de los
empresarios al ahora complicado funcionario. “Todo lo que se habló, él lo sabe. Pero hay
cosas que yo prefiero, no. Anotalo, si querés. Todo lo que yo hablo con vos, él está al
tanto”, acota Leonián.
Finalmente, se habla de los 400.00 pesos en concreto. Mientras el empresario puja para hacer
pisar el palito al intendente -“a mí me apareció un gasto de 400 mil pesos, Roberto, que no
tenía en cuenta”, dice uno de ellos- Porretti se hace el que no entiende, para luego
presenciar, en silencio, cómo el dueño del boliche y Leonián
acuerdan una especie de plan de pagos.