El vicepresidente Amado Boudou fue denunciado hoy por no devolver viáticos de viajes oficiales con el fin de incorporar el dinero a su patrimonio y así intentar justificar sus ingresos ante el juez Ariel Lijo, que investiga el presunto enriquecimiento ilícito del funcionario.
De esta forma, el vicepresidente quedó más comprometido en Comodoro Py, luego de que el mismo abogado que impulsó la causa, Alejandro Sánchez Kalbermatten, se presentara en Tribunales a realizar la ampliación.
"El venal funcionario se apropió para su patrimonio de los viáticos que le fueran confiados en razón de su función, percibiéndolos, no gastándolos, ni rindiéndolos después de las 72 horas de concluidos los actos para los cuales les fueron otorgados por el erario público de la Nación", sostuvo el abogado en su denuncia.
La denuncia de Sánchez Kalbermatten se funda a través del decreto 1906/06, firmado por Néstor Kirchner, que establece que un funcionario público debe reintegrar en 72 horas el saldo de los viáticos que recibió y justificar lo que gastó.
Boudou puso en su declaración jurada 180.700 pesos por viáticos de viajes que hizo en el país y al exterior en 2009, 2010 y 2011, cuando fue titular de la ANSES y ministro de Economía, según fuentes citadas por el diario La Nación.
Acorde al texto, los abogados de Boudou presentaron ante el juez Lijo un escrito en el que justificaron parte del incremento patrimonial del vicepresidente con esos fondos.
Al funcionario se le imputó haber violado el artículo 261 del Código Penal, que castiga con dos a 10 años al "funcionario público que sustrajere caudales o efectos cuya administración, percepción o custodia le haya sido confiada por razón de su cargo".
Esta no es la única acción penal iniciada contra el vicepresidente a partir de viajes oficiales. Además, fue denunciado por haber autorizado viáticos de entre 38 y 140 mil pesos a sus custodios del Senado para viajes que nunca se habrían realizado.
El juez Lijo investiga a Boudou, sus padres, a hermanos, a su novia -la periodista Agustina Kämpfer- y a los empresarios José María Núñez Carmona y Alejandro Vandenbroele por presunto enriquecimiento ilícito.
Además, el vicepresidente también está imputado por su participación en el salvataje de la empresa exCiccone, donde se investiga si tuvo una actuación indebida para que la empresa quede en manos de Vandenbroele, de quien su exmujer dijo que era testaferro del vicepresidente.